SANTIAGO.- Aunque cerca de 500 oficiales de Gendarmería no se sumaron a la nueva paralización que comenzó esta medianoche, el presidente de la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios (Anfup), Pedro Hernández, aseguró que la adhesión es de casi un 100%.
"Respetamos su decisión de haberse bajado del paro (los oficiales), no la compartimos, pero eso no cambia en nada las cosas porque aquí hay tres organizaciones que conformamos 13.500 funcionarios que hoy están adheridos a la movilización", dijo Hernández a Canal 13.
Aunque el dirigente aseguró que éste será un paro ordenado, mientras se mantenga, no harán traslados de imputados hacia los centros penales y tampoco los recibirán en las unidades carcelarias.
"Será un paro disciplinado, es intramuros, es intrarejas, pero no vamos a poner en peligro la seguridad pública y tampoco los derechos de los internos que tienen al interior del penal", aclaró Hernández.
Asimismo, comentó que la movilización sólo tendrá fin cuando el Gobierno los invite a conversar, "pero sobre medidas concretas con las que se pueda avanzar y no signifiquen medidas dilatatorias y de estancamiento".
Ante los dichos del subsecretario de Justicia, Jorge Frei, quien calificó el paro como una medida irresponsable, ya que no se habrían consultado las bases, Hernández respondió que el manejo interno de los gremios "no es resorte de los ministerios, no nos metemos en el trabajo que ellos hacen".
Además, reiteró que la adhesión a éste es total de Arica a Punta Arenas, y es porque "nuestras bases nos siguen y están dispuestas a medidas extremas como las de hoy".
La motivación del nuevo paro radica en que la propuesta entregada ayer por el Gobierno, no dejó conformes a los trabajadores, ya que según los gendarmes, ésta sólo se remitió a mejorar el grado 26 –el más bajo en la escala de sueldos–, sin eliminarlo, como solicitaban los trabajadores.