VALPARAÍSO.- Con tres votos a favor de los senadores Mariano Ruiz-Esquide, Carlos Ominami y Guido Girardi, y dos votos en contra de los senadores Jorge Arancibia y Carlos Kuschel, la Comisión de Salud de la Cámara Alta aprobó la idea de legislar del proyecto sobre información, orientación y prestaciones en materia de regulación de la fertilidad, que entre otras medidas, permite la entrega de la píldora de emergencia.
No obstante ello, los senadores Ruiz-Esquide, Ominami y Girardi anunciaron que durante el debate en particular del proyecto presentarán indicaciones para establecer la obligatoriedad de impartir educación sexual en todos los colegios, mientras el senador Arancibia no descartó hacer reserva de constitucionalidad sobre el proyecto.
El legislador señaló que "no existe una unanimidad frente al efecto abortivo que pudiera o no tener la píldora, pero más allá de eso, no tenemos ningún análisis o estudio de los efectos secundarios que este tratamiento pueda producir y tenemos información en que el empleo de esta píldora bajo ciertas circunstancias produce un aumento de embarazo tubario. Este es un fármaco, que se le reconoce como una verdadera bomba que viene a interrumpir un proceso natural y que puede tener efectos secundarios".
El parlamentario agregó que a ello se suma el fallo del Tribunal Constitucional, el que a su juicio "es una señal que me hace votar en contra e incluso anunciar que dependiendo de la evolución de esto yo haría reserva de constitucionalidad".
En tanto, a juicio del senador Kuschel "hay muchas cosas que tenemos que revisar. (La píldora) tiene elementos abortivos, pero lo que más me preocupa es el embarazo tubario y el daño que eso produce, porque esto es una bomba hormonal que tiene 15 veces más fuerza que otros productos químicos".
Una opinión distinta manifestó el senador Ruiz-Esquide tras señalar que tiene la convicción de que este fármaco no tiene los efectos que señalaron sus pares.
No obstante, anticipó que es fundamental considerar el elemento educativo en el debate de este proyecto, razón por la cual junto a los senadores Ominami y Girardi presentarán indicaciones para establecer la obligatoriedad de impartir educación sexual en los colegios.
"Hay a lo menos tres indicaciones que se refieren a la confidencialidad y a que cada establecimiento privado o público deberá tener en su currículum la educación sexual, conforme a su exclusivo proyecto educativo con participación de los alumnos, los apoderados y la directiva del colegio. Y eso significa hacer clases de educación sexual desde octavo año básico hasta el final, con expresa mención de que debe extenderse a los padres", dijo el parlamentario.
Ahora corresponde que la iniciativa, que cumple su segundo trámite, sea analizada por la Comisión de Constitución, antes de que sea sometida a la consideración de la Sala.