SANTIAGO.- La titular del 34º Juzgado del Crimen de Santiago, Cheryl Fernández, determinó hoy el díctese de la condena a presidio perpetuo calificado para Alejandro Schayman, el publicista boliviano que golpeó a su hija recién nacida, Tamara, hasta causarle la muerte.
La jueza tomó la decisión luego que venciera el plazo que tenían ambas partes para recurrir de casación ante la Corte Suprema. De esta manera ya no procede ningún recurso para evitar que al publicista se le aplique la pena máxima.
Además, la magistrada emitió una orden de captura a la Brigada Investigadora de Búsqueda de Personas de la PDI, debido a que es altamente probable que Shayman haya huido del país.
Su rastro se perdió en julio de 2007, cuando dejó de firmar mensualmente en el tribunal. La policía cree que hoy vive en Sucre, Bolivia, y aunque maneja pistas concretas sobre su paradero, no había podido hacer nada para ubicarlo, pues no existía una orden judicial para buscarlo, detenerlo o notificarlo.
Por ello, ahora también se evalúa la emisión de una orden de captura internacional para la Interpol.
Esta semana Shayman envió una carta a la Corte Suprema en la que insiste en que es inocente y denuncia que el Estado de Chile no le proporciona las garantías suficientes para presentarse personalmente a entregar el patrocinio de poder al abogado que lo represente.
La misiva, firmada por el propio condenado, fue traída por su cuñada, Ximena Tapia, quien indicó que el propósito de su viaje es conseguir un abogado que defienda al publicista.
En la carta, Shayman afirma que por consejo de sus primeros abogados se autoinculpó de los maltratos contra Tamara para que su ex esposa, Marianne Kychenthal, no fuera detenida, "porque se sospechaba que era quien propiciaba los maltratos".
El condenado asegura en que su hija nació con enfermedades congénitas, y que nunca la maltrató.