SANTIAGO.- En medio de las críticas a Sebastián Piñera por el anuncio de un bono de 40 mil pesos en marzo si es que es electo Presidente, el abanderado de la izquierda, Jorge Arrate, consideró que la idea es "correcta", aunque pidió que todos los candidatos a La Moneda se comprometan a concretarlo.
Tras participar en la entrega de propuestas del Hogar de Cristo para impulsar un Chile más fraterno, el ex ministro llamó a sus pares también a "alcanzar al término del próximo gobierno un salario mínimo de un monto equivalente al propuesto por el obispo (de Rancagua, monseñor Alejandro) Goic como salario ético (250 mil pesos)".
El candidato de izquierda llamó a valorar todas las iniciativas que ayuden a los chilenos y chilenas a mejorar su situación. "No por ser ideas de contrincantes políticos, uno debe desecharlas. Me parece una buena iniciativa que todos los candidatos presidenciales acordemos que si somos electos demos un bono para las familias excluidas y que alcancemos el salario mínimo de 250 mil pesos, como lo propuso monseñor Goic al plantear un salario ético", señaló Arrate.
"No obstante, me parece que el bono de marzo puede ser mayor a los 40 mil pesos que propuso Piñera, quien debiera estar siempre dispuesto a dar más donde tienen menos, es lo mínimo que se puede plantear a quien está en la lista de los hombres más ricos del mundo", añadió.
En el encuentro, al que no asistieron los candidatos de la Concertación y del PRI, Eduardo Frei y Adolfo Zaldívar, respectivamente, y que tuvo lugar en el comedor de la hospedería de hombres, Arrate fue recibido por capellán general de la fundación Hogar de Cristo, el sacerdote Agustín Moreira; Susana Tonda, directora ejecutiva de la fundación y Cirilo Córdova, presidente del directorio de la entidad.
La presentación de las propuestas estuvo a cargo de Benito Baranda, director social de la fundación Hogar de Cristo, y en ella se destacaron iniciativas enfocadas a tres segmentos de la sociedad: jóvenes en situación de exclusión con necesidad de oportunidades de educación y empleo; adultos mayores en condición de pobreza y exclusión social y personas con discapacidad mental.
