CONCEPCIÓN.- Ante la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones (PDI) de Concepción, se entregó Máximo Padilla Salas (19), quien el sábado pasado mató a su polola y madre de su hija de tres años, Daniela Cisterna Zenteno (20). La víctima recibió 15 puñaladas, tras ser atacada en el sector Dichato de Tomé.
El detenido se ocultó en casa de familiares y amigos en esa comuna, Coronel, Talcahuano y Concepción, hasta que convencido por sus cercanos se entregó en el cuartel policial.
Ante los policías afirmó que discutió con su pareja, que la siguió cuando abandonó su hogar, que la alcanzó en el antejardín de la casa de una amiga, pero que no recuerda lo que pasó después.
Cuatro personas fueron testigos del brutal ataque que dejó agónica a la mujer, con la que mantenía una relación de seis años y quien murió mientras era trasladada hasta un centro asistencial.
Máximo Padilla fue formalizado por homicidio calificado por el fiscal Andrés Barahona en el juzgado de garantía de Tomé. La magistrada Tania Galgani acogió la solicitud del Ministerio Público y decretó para el acusado la prisión preventiva.
La directora regional del Biobío del Servicio Nacional de la Mujer (Sernam), Riña Oñate, explicó que la familia se querellará con el patrocinio de la abogada Nicole Duffau de la entidad que representa.
El padre de la víctima, José Cisterna, aseguró que "se realizaron varias denuncias por violencia intrafamiliar y nunca se hizo algo, por lo que nosotros las parábamos que iba a pasar esto. Nosotros le decíamos que se apartara de él, pero no hacía caso".
En la audiencia el fiscal expuso que en 2007 y 2008 se le prohibió al imputado acercarse a la mujer, producto de denuncias por maltrato.