SANTIAGO.- Al final todo fue una farsa que se cayó en poco más de 24 horas. El falso secuestro y abuso sexual denunciado por las menores J.A.A. (12) y J.A.E. (12) se fue desinflando poco a poco. A continuación las siete contradicciones en las que cayeron las menores (principalmente una de ellas, ya que la otra dice no recordar los hechos) y que, en definitiva, las delataron en su mentira.
1.- El color del auto: Las niñas señalaron que el color del vehículo en el que fueron secuestradas era blanco, pero después que era rojo.
2.- Las puertas: Pero hay más del automóvil. Una versión indicaba que las puertas del auto se abrían hacia atrás (batiente), pero al rato indicaba que eran de corredera.
3.- Kiosco de bebidas: Al principio una de las niñas dijo que luego de ser dejadas en Nueva Bilbao con Vital Apoquindo se fueron a tomar una gaseosa a un kiosco que había en la esquina; el problema es que en el sector no hay ningún local con esas características.
4.- Amenazas de muerte: Otra contradicción apunta a que las niñas en un principio señalaron recibir amenazas de muerte, pero luego no lo reconocieron.
5.- La micro: La versión inicial apuntaba a que la menor que entregó el testimonio señaló que luego de ser abandonadas subieron a una micro del Transantiago. El problema es que al pedírsele su Tarjeta Bip!, la niña dijo no poseerla.
6.- Caras difusas: La menor que entregó el testimonio dijo no recordar la cara de sus atacantes, aunque sí aseguró que eran morenos.
7.- Zona campestre y sinuosa: Según los dichos de las víctimas, los secuestradores las habrían llevado hasta una zona campestre y sinuosa, pero al reconstruir el recorrido junto a Carabineros en ningún momento llegaron a una zona con esas características.
Aunque las jóvenes podrían exponerse a que se les siga algún tipo de acción penal en su contra por el falso testimonio, el vocero de la Fiscalía Oriente, Mario Schilling, descartó de plano que ello ocurra.
"La fiscalía está enfocada a perseguir delitos reales y serios y no a castigar a niñitas que necesitan orientación y apoyo", dijo el representante del Ministerio Público.
Schilling agregó que este caso es un ejemplo de lo que sucede en su unidad, en la que de cerca de 400 denuncias que han recibido por delitos sexuales, la gran mayoría es falsa, otro tanto está al límite y sólo un bajo porcentaje es real y se llega a condenas.
Los que entregan denuncias inexistentes se exponen a ser perseguidos por delitos como obstrucción a la justicia, injurias y falso testimonio, entre otros.
De acuerdo a los antecedentes de la investigación, las niñas habrían mentido por problemas personales con sus padres y, principalmente, para llamar la atención.