BUENOS AIRES.- Los embajadores de Chile en Buenos Aires, Luis Maira, y de Argentina en Santiago, Ginés González García, coincidieron este jueves en que el tratado de integración que ambos países firmarán la semana próxima es un "bebé robusto que está por nacer".
Maira y González García encabezaron este jueves en la capital trasandina Buenos Aires una reunión de la Comisión Parlamentaria Conjunta Chileno-Argentina en la que se ultimaron los detalles del acuerdo que suscribirán el próximo 30 de octubre las Presidentas de Chile, Michelle Bachelet, y de Argentina, Cristina Fernández.
"El bebé está por nacer y será un bebé robusto", manifestó el diplomático trasandino antes de indicar que el tratado "marca el camino, consolida y profundiza muchos de los instrumentos que se han ido generando en la relación bilateral".
Maira, por su parte, comentó que el tratado marcará una "nueva etapa de la relación estratégica" y afirmó que el vínculo entre ambos países "pasó del conflicto a la confianza mutua y ahora a la amistad".
En ese sentido, destacó como uno de los puntos salientes del acuerdo la "libre circulación fronteriza de ciudadanos argentinos y chilenos".
El acuerdo se enmarca en el bicentenario de la independencia que ambos países celebrarán en 2010 y se suscribirá en el municipio de Maipú, al suroeste de Santiago, donde un Ejército chileno-argentino derrotó a las tropas realistas españolas en la última batalla de esa gesta.
Este acuerdo sustituirá al Tratado de Paz, firmado hace 25 años para desactivar un grave conflicto entre ambos países por la soberanía del Canal de Beagle, en el extremo austral del continente.
Cristina Fernández sellará este nuevo tratado en el marco de la visita que realizará a Chile para inaugurar junto a Bachelet, el mismo día 30, la Feria del Libro de Santiago, que este año tiene a Argentina como invitado de honor.
Durante su estancia en Chile, que comenzará el 29 de octubre, la mandataria argentina acudirá además al Congreso chileno y mantendrá un encuentro con representantes de la Corte Suprema.
En diciembre de 2008, Bachelet y Fernández participaron en Monte Aymond, en la frontera chileno-argentina, en la conmemoración del 30 aniversario de la mediación papal que evitó que sus países fueran a la guerra por la disputa de la soberanía del Canal de Beagle.
En diciembre de 1978, el desplazamiento de militares y el cierre de las fronteras ordenado por Argentina hacía prever una guerra inminente, pero un llamamiento del Papa Juan Pablo II detuvo el conflicto y logró, a través de la mediación del Vaticano, alcanzar un Tratado de Paz y Amistad en 1984.
El nuevo tratado de integración pretende perfeccionar ese acuerdo, que sentó las bases para una relación basada en la paz y en el diálogo entre dos países que comparten más de 5 mil kilómetros de frontera.
El acuerdo se sellará además un mes antes de que ambas mandatarias sean recibidas en audiencia conjunta por Benedicto XVI en el Vaticano, en una ceremonia que recordará la mediación papal de hace tres décadas.
