Esta mañana, el encargado de Negocios de Perú, ministro Guido Toro fue citado al edificio Carrera, donde el director de América del Sur, embajador Jorge Montero, le entregó la nota diplomática.
La misiva deja de manifiesto que "el Gobierno chileno rechaza los términos de la nota peruana, por estimar que los mismos no se condicen con el espíritu constructivo que debe presidir la relación bilateral".
El texto precisa además que se procederá a un "cuidadoso estudio" de los antecedentes proporcionados por el gobierno peruano y que los resultados se comunicarán a ese país, una vez que los análisis hayan concluido.
De esta manera, sólo en ese momento se definirá si corresponde o no que Chile investigue la denuncia peruana, algo que Lima cree prioritario. De hecho, así lo manifestó el canciller peruano, José Antonio García Belaunde, en entrevista con "El Mercurio" el fin de semana. En ella señaló que Perú considerará como satisfactoria una respuesta cuando Chile investigue su denuncia, "se deslinden responsabilidades y se sancione".
El ministro peruano dijo además que espera que "antes de la Cumbre Iberoamericana, en Estoril, hayan tenido tiempo de comprobar que hay indicios de delito, que ameritan una investigación".
Frente a ello, Fernández, junto con reiterar la postura de Chile, en el sentido que el país no realiza espionaje, señaló: "Vamos a estudiar los antecedentes, vamos a proceder a recabar información o a investigar si corresponde, y le daremos una oportuna respuesta al gobierno del Perú (...) pero el resultado de todos los antecedentes que tenemos es imposible entregarlo en dos o tres días".