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Mujer que disparó contra delincuentes: "Pensé que iban a matar mi padre"

Alejandra Caviedes frustró el asalto del que iba a ser objeto su protegitor, un botillero de Cerro Navia, y aseguró que si nuevamente le ocurriera una situación similar no dudaría en disparar.

30 de Noviembre de 2009 | 14:36 | Por Francisco Águila, Emol

SANTIAGO.- La alarma de un timbre permitió a Alejandra Caviedes Moreno (44), hija del botillero Alfredo Caviedes (69), no sólo frustrar un violento asalto a su padre, sino que además dejar gravemente heridos a los dos antisociales que llegaron en pleno día a su local de Cerro Navia.


El hecho se produjo pasadas las 14.30 horas de ayer cuando Gustavo Adolfo Canaval Valdés (32) y Sebastián Humberto Rebolledo Valdés (27) llegaron hasta el local, ubicado en la calle Cauquenes, armados con un cortaplumas e intimidaron al locatario.


"Mi papá tocó un timbre conectado a la casa de atrás. Al salir, vi que lo tenían arrinconado detrás del mostrador en el costado derecho. Volvía  mi casa y subí al segundo piso y saqué mi revolver y, al salir, los sujetos se violentaron y empezó el forcejeo y sacaron nuevamente la cuchilla que tenían y no tengo noción de en qué momento apuñalaron a mi papá", señaló Alejandra, relatando el inicio del forcejeo que ella y su padre mantuvieron por unos diez minutos con los delincuentes.


Así, en medio de la lucha, la mujer disparó cinco veces en el abdomen de Canaval, dejándolo en estado grave y con peligro de muerte. Mientras que el otro sujeto, que seguía forcejeando con su padre, recibió un tiro en la espalda.


"Yo nunca había disparado. Ante estas circunstancias usted no lo puede pensar, tiene que actuar. No por la defensa de los bienes, yo pensé que lo iban a matar a él (su padre), porque vi a dos tipos jóvenes contra mi papá que tiene 69 años. Yo lo volvería a hacer", señaló la mujer.


Tras el hecho, Canaval fue trasladado hasta el Hospital San Juan de Dios, mientras que su cómplice fue llevado hasta el Hospital San José, donde permanecen internados.


Esta mañana, Alfredo Caviedes confesó estar preocupado por las posibles represalias que pueda sufrir su familia.


"Lo único que queda ahora es terminar el negocio nomás, porque estos tipos vuelven. Pienso terminarlo por el peligro que encierra, si uno no puede trabajar tranquilamente ya. Esto ocurre a diario y en todas partes. Uno piensa que nunca le va pasar, pero cuando le ocurre a uno ahí se da cuenta de que la cosa es seria", dijo.


En tanto, el jefe de la 45ª Comisaría de Cerro Navia, mayor Miguel Jara, sostuvo que Carabineros ya tiene contemplado "mantenernos preocupados de su condición, por lo que  hemos implementado servicios para visitarlos con cierta frecuencia y evitar que sufran algún daño".


El futuro procesal de los dos asaltantes está ahora en manos de la Fiscalía Centro-Norte, donde se esperará a saber si pueden ser o no ser formalizados por el delito de robo con intimidación.

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