SANTIAGO.- La resolución del ministro Alejandro Madrid que estableció que el ex Presidente Eduardo Frei Montalva fue asesinado también da cuenta de una serie de irregularidades que rodearon el homicidio. A continuación las anomalías que logró acreditar el magistrado y que alimentaron las sospechas de la familia Frei durante 27 años.
Según el texto de la resolución, el ex Mandatario fue operado el 18 de noviembre de 1981, presentando molestias, lo que provocó que fuera sometido a una segunda intervención a cargo del Médico Patricio Silva, quién trabajó en el Hospital Militar. La operación se llevó a cabo el seis de diciembre de ese año, dos días después de ser reingresado, lo que demuestra que la intervención no se efectúo con la urgencia que el diagnóstico de una obstrucción intestinal aconsejaba, dice el texto.
Mientras Frei Montalva estaba hospitalizado, la enfermera María Elena Zamorano declaró que al llegar a su turno y concurrir a la habitación del ex Presidente, éste estaba “sudoroso, descompensado, la presión baja, el suero estaba fuera de la vía venosa y su cama impregnada de sangre, había perdido mucha sangre” lo que provocó su traslado a la Unidad de Cuidados Intensivos.
Además, durante su periodo de hospitalización se recibió un aviso por parte de cercanos a la familia del enfermo, acerca de que éste pudiera estar siendo envenenado, sin embargo, sólo se tomaron medidas para impedir el acceso a extraños a las dependencias donde permanecía Frei Montalva.
En el documento se insiste en que Patricio Silva, médico del ex gobernante, aplicó un producto denominado “Transfer Factor” el que se encontraba en etapa de experimentación y no estaba certificado ni autorizado.
Además, los hombres involucrados en el asesinato se vieron favorecidos por una serie de circunstancias provocadas con anterioridad al delito, tales como la desprotección de seguridad por parte de la autoridad gubernamental y policial, la intervención telefónica, además de la infiltración de personas en su círculo más cercano.
Otra de las irregularidades que se desprenden del documento es que sin contar con la debida autorización de la familia y sin que ésta fuera informada, se realizó por parte de un equipo médico un procedimiento que significó la extracción de los órganos del cadáver del occiso, con la finalidad de someterlo a exámenes patológicos.
El ministro Madrid señala como conclusión que la muerte del ex Presidente fue ocasionada por la introducción paulatina de sustancias tóxicas no convencionales, por la aplicación de un producto farmacológico no autorizado y por la ocurrencia de diversas situaciones anómalas, que pudieron ser disimuladas como inadvertidas.