SANTIAGO.- El retraso de peritajes claves en la investigación impidió llevar a cabo el juicio abreviado que estaba fijado contra Guillermo Miranda Sánchez, el dueño de la jauría de perros que en noviembre pasado dio muerte a Patricia Araneda (56) y su hija Loreto Saavedra (25), en la comuna de Peñaflor.
De acuerdo al fiscal de Talagante Daniel Ríos al momento de iniciarse la audiencia "faltaban algunas pericias en la carpeta del Ministerio Público" y que darían cuenta de información sobre la sangre encontrada en el hocico del animal.
El persecutor explicó que es necesario establecer si los fluidos en la boca de los canes de propiedad del imputado "corresponde o no las víctimas", información esencial que estaría siendo analizada por el Laboratorio de Crimen de La Serena.
Debido a lo anterior, el magistrado determinó que el juicio abreviado fuera postergado para el 19 de mayo a las 09:30 horas en el Juzgado de Garantía de Talagante.
Miranda Sánchez, quien arriesga una condena de 5 años de presidio, continúa cumpliendo un régimen cautelar de arresto domiciliario.