La breve visita del Mandatario norteamericano sigue generando comentarios.
EFESANTIAGO.- Tanto el canciller Alfredo Moreno como el presidente del Senado, Guido Girardi (PPD), refutaron las críticas que parlamentarios de la Concertación realizaron a la visita del Mandatario norteamericano, Barack Obama, por considerar que ésta tuvo "mucho ruido y pocas nueces".
"A mí me llama un poco la atención algunos comentarios, porque esto es lo mismo que venían diciendo todos los analistas, solicitando que Estados Unidos fuera a una nueva etapa, no la etapa de hace 50 o 60 años, sino que a una etapa en el cual había un pie de igualdad", dijo el ministro de Relaciones Exteriores.
En esa línea, el secretario de Estado agregó que "quienes esperaban recibir del Presidente de Estados Unidos una receta completa de qué es lo que teníamos que hacer, no están entendiendo exactamente cuál es el mensaje y éste es: somos iguales, caminemos juntos y si vamos a caminar juntos, tenemos que determinar juntos también la dirección hacia donde vamos a caminar".
Moreno se mostró en sintonía con las declaraciones que previamente formuló el Presidente Sebastián Piñera, quien destacó que Obama "planteó una relación entre iguales", es decir, donde los derechos y las responsabilidades sean compartidos por todos los países que se integren a esta nueva etapa.
Por su parte el titular del Senado rechazó las críticas al destacar que, en su intervención, el gobernante norteamericano reafirmó "valores permanentes y distintos" a los que siempre ha impulsado su país.
"Algunos hubiesen querido que el Presidente Obama hablara más y más específicamente de muchos temas, pero él es un afroamericano, vivió en carne propia la exclusión, es meritocrático, tiene una historia de vida que comunica. Él, cuando habla desde Chile, le está hablando al planeta y me parece muy importante que reafirme valores permanentes y distintos a los que siempre ha impulsado Estados Unidos", manifestó.
No obstante, el senador del PPD reconoció que le hubiese gustado escuchar referencias a la responsabilidad que tuvo Estados Unidos en el golpe de Estado de 1973.
En otro ámbito, reveló que durante la cena en honor ofrecida en La Moneda al Presidente Obama tuvo la oportunidad de compartir mesa con la Primera Dama de Estados Unidos, Michelle Obama, a quien le propuso liderar la campaña contra la obesidad, los infartos y accidentes vasculares a nivel global, y le expresó el interés del país de sumarse a ésta.