Grupos ambientalistas anunciaron masivas protestas para el 21 de mayo en rechazo al proyecto energético de Aysén.
AFPSANTIAGO.- A días de celebrarse el 21 de mayo, con anuncios de protestas masivas de grupos ambientalistas que se oponen a HidroAysén, la Iglesia Católica hizo un llamado a evitar posturas confrontacionales entre los diversos actores.
"Como obispos nos interesa estimular un diálogo serio, abierto e informado, evitando posturas confrontacionales, procurando un sano discernimiento", afirmó este mediodía el encargado de comunicaciones del arzobispado, Jaime Coiro.
Ante el debate energético que se ha suscitado en las últimas semanas, el vocero de la Iglesia señaló que el dilema que presenta un proyecto energético es "cómo compatibilizar el respeto por el medio ambiente con la creciente demanda por la energía".
Tras ello, y sin referirse expresamente a HidroAysén, Coiro sostuvo que una "decisión basada sólo en intereses económicos es éticamente inaceptable y deplorable, porque constituye una mezquina burla a la sociedad".
A continuación, enfatizó que "la Iglesia no concibe al desarrollo sin considerar la sostenibilidad medioambiental", por lo que "antes de afirmar la creciente demanda por energía como requisito para el progreso, es preciso abordar un proceso como país para construir en conjunto un modelo de desarrollo".
El Episcopado finalmente advirtió que "una respuesta humanizadora al desafío energético requiere un diálogo en el que todas las personas y comunidades, especialmente los más involucrados y afectados por las iniciativas, puedan participar y sus opiniones sean tenidas en cuenta para las decisiones que les afectan".