SANTIAGO.- El presidente del Partido Progresista (PRO), Marco Enríquez-Ominami, reiteró su postura de rechazar las negociaciones con la Concertación si es que éstas se basan en "cuotas o cupos" y no en ideas y propuestas.
"Con algunos líderes, no con todos, diputados, alcaldes, dirigentes del imaginario de la Concertación nos entendemos muy bien. Nos cuesta muchísimo con los líderes que nos proponen todos los días, acuerdos de cuotas o cupos", dijo sobre la invitación que la suya y otras colectividades de oposición recibieron para reunirse con la Concertación.
Ante esto agregó que sí tiene la disposición para pertenecer a un frente amplio de oposición, aunque desde fuera del pacto al que alguna vez perteneció.
"Nuestro debate no es la Concertación, el desafío es un Gobierno que tiene demasiada frivolidad en sus ministros, falta de conducción, que es el Gobierno de Sebastián Piñera, ese es nuestro adversario, no la Concertación. Sí, con sus dirigentes nos cuesta mucho trabajar", explicó.
Por este motivo Enríquez-Ominami aseveró que no quiere terminar con "la ruptura que encarnamos el 2009", emplazando al pacto opositor a hacer una autocrítica.
"Espero que la Concertación haga algo que no ha hecho todavía, un proceso de autocrítica, le falta todavía. Como muchos chilenos, observo atento lo que le pasa a las coaliciones políticas y hay dos coaliciones entrampadas que no están entendiendo lo que está pasando en Chile", concluyó.