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Santiago: Viernes 31 de enero del 2025 | Actualizado 11:41
La cita se prolongó hasta cerca de las 21:00 horas.
Harold Castillo, El MercurioSANTIAGO.- El arzobispo de Santiago, monseñor Ricardo Ezzati, descartó volver a ejercer como mediador ante la huelga de hambre que han mantenido por 80 días cuatro comuneros mapuches vinculados al atentado contra el fiscal Mario Elgueta.
La autoridad eclesiástica recibió por más de cuarenta minutos en su hogar a las madres de José Huenuche y Héctor Llaitul, emitiendo su negativa a actuar como nexo entre los huelguistas y el Gobierno, tal como lo efectuó en octubre de 2010.
Además, pese a que durante la jornada "valoró" la medida de la Corte Suprema sobre acoger de manera parcial la reducción de las penas a los implicados, indicó que esperaba "otro tipo de medida", indica radio Bío Bío.
En la cita también estuvo presente la vocera de los comuneros, Natividad Llanquileo
El máximo tribunal resolvió que el proceso sólo debía considerar los delitos de lesiones simplemente graves contra funcionarios de la PDI y lesiones menos graves contra el fiscal Elgueta.
Sin embargo, no modificó las penas por el delito de robo con intimidación contra el agricultor Santos Jorquera, por las cuales también fueron condenados en el juicio de Cañete.
De esta manera, Ramón Llanquileo, José Huenuche y Jonathan Huillical deberán cumplir una pena efectiva de ocho años y dos días de cárcel, mientras Héctor Llaitul cumplirá 14 años y un día de presidio. En el juicio oral, los tres primeros había sido condenados a 20 años de cárcel y Llaitul a 25 años.
La defensa de los reos esperaba que la Corte Suprema acogiera totalmente el recurso y se decretara la realización de un nuevo juicio en Cañete que excluyera las pruebas aportadas por testigos protegidos.
