SANTIAGO.- A pesar de que se depuso la toma del Liceo Barros Borgoño, el alcalde de Santiago, Pablo Zalaquett, recibió duras críticas tras haber autorizado el desalojo de este establecimiento educacional este lunes.
Los concejales Ismael Calderón (PS) y Claudia Pascual (PC), además de padres, apoderados, profesores y alumnos de establecimiento, rechazaron la actitud persecutoria por parte del edil, luego que personal de Carabineros se enfrentara y detuviera a más de 75 personas, entre ellas, dos profesoras.
Según Calderón, estas medidas tienden a criminalizar las demandas de los jóvenes. "No corresponde un trato de esta forma a una parte mayoritaria de la comunidad escolar. No es posible que profesores que se ofrecieron a dialogar con los estudiantes sean reprimidos con detenciones y sumarios que no corresponden", dijo.
Precisando que en el Liceo Amunategui se bajó una toma de manera pacífica, el concejal por el PS enfatizó que hoy existen colegios de primera y segunda categoría para la máxima autoridad comunal.
"Lo insto al diálogo y no a fomentar la violencia, considero que no es posible que se autorice de ninguna forma el ingreso de la fuerza pública a nuestros liceos", agregó.
A propósito de las tomas que se han desarrollado en varios establecimientos de la capital, los concejales solicitaron al ministro de Educación, Joaquín Lavín, que inicie urgentemente una mesa de diálogo con los estudiantes.
Sus principales exigencias son apurar la reconstrucción de los edificios tras el terremoto y el pase escolar gratuito y sin restricciones a nivel nacional.