Lavín: "Tomarse un colegio no tiene como premio una reunión con el ministro"

SANTIAGO.- El ministro de Educación, Joaquín Lavín, anunció este miércoles que sólo dialogará con los alumnos de colegios que se encuentren en clases y no con los que protagonicen "tomas", luego que en esta jornada el Liceo Confederación Suiza se sumara a los establecimientos ocupados por estudiantes que exigen una educación estatal, pasaje escolar gratuito y mejoras en los recintos técnicos-profesionales.

"Como ministro estaré siempre abierto al diálogo, pero tomarse un colegio no tiene como premio una reunión con el ministro, porque aquí los buenos alumnos tienen sus derechos. Vuelvan a clases y conversamos", emplazó Lavín.

El secretario de Estado dijo que entregará todo su respaldo a las acciones judiciales que emprendió el alcalde de Santiago, Pablo Zalaquett, para sancionar a quienes el lunes pasado causaron millonarios destrozos en el Liceo Barros Borgoño.

Asimismo, el titular de Educación -que descartó acudir a tribunales por la agresión que él sufrió ayer en el Centro Cultural Gabriela Mistral- accedió a dar $ 50 millones solicitados por el edil para reponer el mobiliario destruido en el mencionado establecimiento.

"Como ministro me duele haber tenido que firmar este documento y entregar $ 50 millones, porque en Chile hay colegios mucho más pobres que el Barros Borgoño. Hay que seguir con las acciones judiciales, porque no puede ser que todos los chilenos paguen por los destrozos de un grupo de vándalos", manifestó.

Zalaquett, por su parte, anunció que cada vez que haya encapuchados en un colegio tomado, que se produzcan actos vandálicos dentro o fuera de éste y que se registren atentados contra Carabineros, el municipio ordenará el desalojo inmediato del lugar.

Además se adoptará esta medida cuando el grupo que ocupe el colegio sea minoritario, no represente a la mayoría y no sea parte del centro de alumnos. En cuanto a las "tomas pacíficas", éstas se revisarán caso a caso junto a la policía uniformada.

Zalaquett también solicitó a los directores de los liceos capitalinos que apliquen el reglamento escolar "al pie de la letra" y, si corresponde la expulsión, que se ejecute. "Ellos van a tener todo nuestro apoyo. Ningún director puede sentirse solo", garantizó.

De igual forma, el jefe comunal pidió a los jóvenes movilizados "que tomen conciencia de que están matando la educación pública", ya que hoy ese sector registra el 40% de la matrícula escolar y que, con este tipo de acciones, la cifra no será mayor al 15%.

El llamado lo extendió a los padres y apoderados, para que luchen por la defensa de la educación pública y que se aísle a los violentistas.