Personal de la PDI sigue buscando las extremidades y cabeza de la víctima.
Mario Quilodrán, El MercurioSANTIAGO.- El principal sospechoso de matar y mutilar a Jessica Vivanco Cocio, una temporera de 21 años que vivía en la localidad de Freire, por primera vez enfrentó a los familiares de la joven.
"Perdón, pero ella ya estaba muerta ya, le pido perdón por lo que pasó", dijo Miguel Ahumada Correa, presunto autor del crimen, durante su control de detención en el Tribunal de Garantía de Pitrufquén.
En medio de la audiencia el padre de la víctima, Rigoberto Vivanco, agredió al imputado abalanzándose sobre la mesa en la cual estaba tomando asiento para escuchar los descargos de la Fiscalía.
Tras los incidentes, el imputado decidió guardar silencio. Al final de la audiencia, el abogado defensor del acusado indicó que Ahumada tendría la intención de prestar declaración el próximo lunes en la Fiscalía de Pitrufquén. Fue enviado a la cárcel de Lautaro después de que el tribunal aceptara ampliar el plazo de detención.
En tanto, el fiscal Luis Torres dijo que existen pruebas que relacionan directamente a Ahumada con este asesinato, a quien se le formalizaría por el delito de homicidio calificado con las agravantes de premeditación y alevosía.
El persecutor agregó que el cráneo encontrado en Padre Las Casas ayer no corresponde a Jessica Vivanco, como se especuló en las primeras indagaciones. Por ello, Personal de la PDI sigue buscando las extremidades de la joven asesinada.