SANTIAGO.-La Fiscalía de San Felipe formalizó este martes una investigación en contra de Nicolás González Aguilera (19), el presunto autor del homicidio de Tamara Lepe Vargas (21) la joven embarazada que fue asesinada este domingo por su ex pareja en medio de una discusión en la comuna de San Felipe.
Las lesiones que presentaba el cadáver de la mujer, según señaló en audiencia el fiscal Osvaldo Basso, son sólo comparables con la caída desde una gran altura o las que deja un violento accidente de tránsito. Esto no calza con las versiones del imputado quien señaló que con golpes de manos y pies terminó con la vida de su ex pareja.
"Ella murió por un traumatismo esquelético visceral, lesiones que uno ve en accidentes de tránsito violentos o en caídas al vacío desde alturas considerables. Nos llama la atención que con puños y pies haya propinado daños de tal magnitud al cráneo, tórax y cuello de la víctima, que le haya prácticamente destruido el rostro y fracturado el cuello y varias costillas", dijo el prosecutor.
La Fiscalía de San Felipe solicitó la medida cautelar de prisión preventiva para González, situación que fue aceptada por el tribunal que acogió el argumento de que la libertad del imputado puede significar una peligro para la seguridad de la sociedad.
En la audiencia se detalló además que el joven, luego de consumada la agresión de la que se encuentra confeso, intentó ocultar las evidencias del caso lanzando al río sus prendas ensangrentadas, pese a lo cual su propio padre lo entregó a Carabineros para que se aclarara el caso ante la justicia.
8 meses de embarazo
La mujer tenía ocho meses de embarazo y su hijo murió en su vientre, ya que no alcanzó a recibir atención médica oportuna. De acuerdo con los primeros antecedentes de la investigación, la agresión se habría producido tras una discusión por temas de dinero y paternidad del niño que estaba por nacer, situación que es indagada por la fiscalía.
El nivel de violencia de la agresión quedó evidenciado en las lesiones de carácter defensivo que se encontraron en las extremidades de la mujer, y en los nudillos del imputado.
La fiscalía enfrentó esta etapa procesal con un preinforme de autopsia, cuya versión definitiva arrojará antecedentes más detallados sobre el fatídico hecho. Se dispuso un plazo de 100 días para culminar la investigación.