Ballesteros y futuro del movimiento: "No queremos convertirnos en una productora de marchas"

SANTIAGO.- Pese a las fuertes diferencias internas que quedaron en evidencia al interior de la Confech y al revés sufrido en la aprobación del Presupuesto de Educación, el presidente de la Feusach, Camilo Ballesteros, sostuvo que el objetivo de la dirigencia es proyectar el movimiento estudiantil durante el próximo año, aunque anunció que cambiará la forma en que se han movilizado hasta ahora.

"Aquí la movilización continúa hasta que logremos nuestro objetivo. Quizás tendremos que pasar por distintas fases, unas más radicales que otras", explicó Ballesteros, señalando que "lo que hemos determinado a nivel universitario es que hoy día pasamos a una nueva fase que tiene características distintas".

En ese sentido, detalló que en los próximos meses los estudiantes se abocarán más a la discusión interna de contenidos que a la realización de marchas y manifestaciones públicas, las que debieran disminuir su intensidad.

"La única forma no son las marchas, no son los paros, no son las tomas. Yo creo que aquí lo peor que podríamos hacer es que nos transformemos en una productora de marchas. Eso pierde el contenido y hoy día (realizar) acciones sin contenidos es absurdo", subrayó.

Consultado sobre si este cambio de dinámica implicará que disminuya la fuerza del movimiento, señaló que "si se quiere ver desde cuántas marchas van a haber, van a ser en menor cantidad, pero si se quiere ver desde la cantidad de discusión que se va a generar, yo creo que va a ser mayor".

Indicó que en esta nueva etapa en muchas universidades, como la Usach, los alumnos actuarán en forma coordinada con la rectoría, para que se suspendan las clases cuando haya jornadas de discusión. "Se quiere pasar de una etapa de estar (movilizados) solamente los estudiantes a que sean las instituciones las movilizadas", afirmó.

Inclusión de alumnos de Ues privadas

En este contexto, el dirigente insistió en que la intención de la Confech es integrar a los estudiantes de las universidades privadas en una plataforma única que represente a todos los alumnos de educación superior.

Según Ballesteros, esto otorgaría mayor "potencia y fortaleza" al movimiento el próximo año. "El Gobierno instaló (la idea) que si somos todos los estudiantes iguales por qué tenemos distintos beneficios. Nosotros creemos que los estudiantes son iguales, pero son las instituciones las diferentes", remarcó.

Junto con la discusión interna, señaló que también centrarán también sus esfuerzos en incidir en los proyectos de ley de Educación Superior que enviará el Ejecutivo o se discutirán en los próximos meses en el Congreso, especialmente el relacionado con la Superintendencia, la acreditación y las universidades del Estado.