El obispo de Temuco, Manuel Camilo Vial.
Patricio Ulloa, El Mercurio
SANTIAGO.- "A quien mis hechos o palabras pudieran haber ofendido o causado daño, le pido sinceramente perdón", afirmó este viernes el obispo de Temuco, Manuel Camilo Vial, tras reconocer que había conocido con anterioridad las denuncias de abusos contra menores cometidos supuestamente por el ex párroco de Putaendo, José Francisco Valenzuela.
La autoridad de la Iglesia Católica declaró esta semana como testigo en el juicio contra Valenzuela, que se realiza en el Tribunal de Garantía de San Felipe.
El ex párroco de Putaendo es acusado de embarazar en 1989 a una menor de 14 años, quien luego abortó.
En su declaración, el obispo Vial reconoció que, en su calidad de superior de Valenzuela, le correspondió "escucharlo y reprenderlo". Al ser consultado sobre porqué no denunció el hecho a las autoridades, señaló que en esa época, a diferencia de hoy, "no había claridad" sobre los procedimientos que la Iglesia recomienda en este tipo de casos.
"No tuve intención de minimizar el daño"En su declaración de hoy, el prelado manifestó que "en ningún caso" tuvo la intención "de minimizar el daño realizado ni de justificar la agresión ni al agresor", según radio Cooperativa.
"De manera clara y categórica rechazo una vez más cualquier tipo de abusos contra menores. En este caso y en otros, no hay razón que justifique un pecado y un delito tan espantoso", añadió.
"Con honestidad y transparencia, he declarado judicialmente la verdad de todo cuanto supe, todo cuanto hice y no hice, considerando la información y percepción que disponíamos a fines de los '80, tanto en la Iglesia como en la sociedad, sobre la prevención de este tipo de hechos", agregó.
Ezzati respalda a obispo Vial
Esta tarde, el arzobispo de Santiago y presidente de la Conferencia Episcopal, monseñor Ricardo Ezzati, respaldó al obispo Vial tras su declaración.
"El obispo de Temuco ha declarado lo que tenía que declarar. Es muy diferente el clima en el que nos encontramos hoy día, después de que todo el mundo ha progresado en el conocimiento de una situación como ésta, un delito como éste", afirmó.
"Vale la pena creer que el obispo actuó con rectitud y con los conocimientos de la época", añadió.
Varios casosEn junio de este año,
el Vaticano prohibió al ex párroco Valenzuela el ejercicio del sacerdocio debido a la imputación de otros casos de abusos, que afectaron a tres acólitos de entre 13 y 17 años de edad entre 2002 y 2005.
Los hechos fueron conocidos tras la denuncia de una de las víctimas, quien hoy tiene 20 años.