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Santiago: Sábado 23 de noviembre del 2024 | Actualizado 02:07
SANTIAGO.- El ministro de Transportes, Pedro Pablo Errázuriz, detalló este martes los nuevos contratos que regirán entre el Gobierno y los operadores del Transantiago.
Según el secretario de Estado, los nuevos convenios las obligarán a detenerse en los paraderos, mejorar sus frecuencias, controlar la evasión, disminuir el número de trasbordos y resguardar a los trabajadores del sistema, mediante el pago de una millonaria boleta de garantía en caso de incumplimientos laborales.
"No queremos otro big bang como el de 2007, por eso ahora el principal desafío será implementar las mejoras que vienen con estos contratos de forma paulatina, informando a los usuarios de las mejoras, cambios de recorridos, pero también exigiendo y vigilando a las empresas para que cumplan las nuevas condiciones", dijo.
El ministro recordó que durante el proceso "largo y duro" de negociación se realizaron consultas ciudadanas, conversaciones con expertos y viajes en hora punta, con el objeto de identificar los principales problemas en los horarios de mayor afluencia de pasajeros.
"Hubo discusiones muy importantes, ya que teníamos el poder de expropiar el contrato. Y a eso se sumó que algunas empresas crecieron", lo que facilitó la concreción de los nuevos acuerdos, afirmó, recalcando que comenzarán a regir en forma paulatina entre enero y febrero, una vez que la Contraloría General tome razón.
Errázuriz manifestó su esperanza de que los operadores "estén a la altura del nuevo desafío", destacando que se sentaron las bases para una nueva relación entre privados y el Gobierno.
"Era indispensable actuar ahora para evitar que los santiaguinos siguieran condenados a un mal servicio de transportes hasta el término de los malos contratos actuales, estipulado para el año 2022", añadió.
De esta forma, se espera cumplir con los tres objetivos principales de los nuevos contratos: Mejorar la calidad del servicio, disminuir los costos del sistema haciéndolo más eficiente y, por último, redefinir los roles del Transantiago.
- 70% de los ingresos que recibirán serán por pasajero transportado.
- Cambio al sistema troncal-alimentador: Las antiguas zonas del Transantiago se fusionan, con menos "cortes" y mayor continuidad en los grandes ejes viales capitalinos. Habrá seis zonas alimentadoras y cinco troncales, las que se distribuirán entre siete empresas que podrán competir dentro de esos espacios, reduciendo trasbordos.
- Calidad de servicio como foco del transporte: Las empresas tendrán
descuentos por mala gestión y atención a usuarios.
- Empresas se hacen responsables de la evasión: Deberán buscar fórmulas para su control (zonas pagas, validadores, torniquetes).
- Más atribuciones fiscalizadoras sobre los buses: El Ministerio contará con mayores facultades para evaluar las condiciones de los buses.
- Fin de zonas exclusivas de concesión: Existirán zonas preferentes y
no exclusivas. Permitirá generar una competencia controlada.
- Protección a los trabajadores: Las concesionarias deberán entregar boletas
de garantía de hasta 18 mil U.F. al Ministerio de Transportes.
- Renovación de flota: Eliminación de los más de 800 buses "enchulados".
- Viajes cómodos: Mejor diseño interior, inclinación de asientos, más agarraderas e iluminación interior.
- Más facultades a la Coordinación de Transantiago para exigir mejoras rápidas y oportunas ante contingencias.
