SANTIAGO.- El ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, entregó este miércoles la cuenta pública de su cartera, ocasión en la que calificó el 2011 como un "año complejo" debido a las más de 5 mil manifestaciones que se llevaron a cabo en el país, y reiteró la voluntad del Gobierno de proteger a los miles de chilenos afectados por las marchas.
En ese sentido, Hinzpeter señaló que "el orden público es para nosotros fundamental. Sin orden público no hay posibilidad de convivencia civilizada, sin orden público es el terror el que se apodera de nuestras calles".
"La verdad, es que manifestarse o protestar no es el problema. El problema está en quienes creen que pueden hacer propicia la ocasión de una manifestación para cometer actos de vandalismo o comportamiento antisocial. Ahí sí esta el problema y cuando uno como autoridad política quiere reaccionar, se encuentra que tenemos un artículo, creo que es el 491 del código penal, del siglo ante pasado", agregó el ministro.
Por ello, el secretario de Estado destacó el proyecto de ley enviado por el Gobierno que fue aprobado en general en la Cámara de Diputados que establece una regulación "moderna" en materia de orden público, tipificando delitos que no existían en nuestra legislación como el saqueo.
El jefe de Gabinete criticó además a los organismos de Derechos Humanos y a los dirigentes políticos que acusaron el abuso de las fuerzas policiales durante las manifestaciones, situación que calificó como "una paradoja".
"La verdad es que aquí siempre ha habido una paradoja que a mí no deja, lo digo con honestidad, de molestar. Muchos organismos de Derechos Humanos o dirigentes políticos se ocupan mucho de los derechos de los manifestantes, y está bien que lo hagan. Pero son pocos los que ponen su atención sobre los derechos de cientos de miles otros ciudadanos que quieren simplemente hacer su vida en forma tranquila y pacífica", sostuvo.
En esa misma línea, Hinzpeter realizó una velada crítica a la popularidad de los dirigentes estudiantiles que encabezaron la mayoría de las marchas, como Camila Vallejo y Giorgio Jackson. "Nuestro gobierno se va a preocupar de que se ejerza el derecho a manifestación, pero también se va a preocupar de los otros chilenos que quieren vivir en paz. Porque en Chile no tenemos, por simpáticos, carismáticos o atractivos que sean, no tenemos grupos privilegiados y todos los chilenos valemos y valen lo mismo ante la ley y son igualmente objeto de la preocupación de este Gobierno", concluyó.
Junto a ello, en la que es la cuenta pública más extensa de todos los ministros, el jefe de gabinete destacó la ampliación de la cartera de Interior para incluir la Subsecretaría de Seguridad Pública encabezada por Cristóbal Lira y el regreso de Carabineros y la PDI al ministerio.
Finalmente, puso énfasis en el impulso que su cartera le dio a las reformas políticas del Gobierno, sobre todo a la ley de inscripción automática y voto voluntario aprobada durante la semana pasada por el Congreso, además de la ley de plebiscitos comunales, la elección directa de los consejeros regionales y el sistema de primarias para cargos de elección popular.