El trabajo de brigadas chilenas y extranjeras que actúan contra el fuego comienza a dar frutos.
El Mercurio
SANTIAGO.- Un mejoramiento muy significativo mostró este viernes el combate a la trágica ola de incendios forestales que se desencadenó sobre el país desde poco antes del inicio de este año. Hasta la noche, sólo se mantenía una alerta roja situada en el Parque Torres del Paine.
La información, contenida en el último informe emitido por la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), prevé que las condiciones climáticas darán un respiro a los cientos de brigadistas que combaten el fuego en el sur del país y les darán más oportunidades para controlar los siniestros que siguen activos.
Según el organismo, en todo el país se mantienen activos 10 siniestros forestales y 22 se encuentran contenidos. El total es inferior en seis incendios a la situación que se registraba el jueves.
Las seis provincias que se encontraban en alerta roja el miércoles bajaron hoy a una. Se trata de Última Esperanza, en la Región de Magallanes y Antártica Chilena.
Continúa la condición de alerta amarilla en las regiones del Maule, Biobío y la Araucanía, en las restantes provincias de Magallanes y en la comuna de Ancud, Región de Los Lagos, precisó el director nacional de Onemi, Vicente Núñez.
Las regiones Metropolitana, de Valparaíso, O'Higgins, Los Ríos, Los Lagos y Aysén se mantienen con alerta temprana preventiva.
Contención eficaz
En la Región del Maule, los focos de fuego en Cauquenes y Linares se mantenían bajo control y hoy continuaron las tareas para extinguirlos. El pronóstico del tiempo prevé vientos de menos de 20 km/h y temperatura máxima de 18°C.
En la Región del Biobío seguían dos incendios activos y seis ya se encontraban contenidos este viernes en la noche. Los pronósticos del tiempo señalan una máxima de 19°C y vientos moderados, lo que favorecerá la extinción del principal siniestro, el de Pichiqueima, que ha arrasado más de 25 mil hectáreas.
En la Araucanía, el reporte de la Onemi consigna 15 incendios, 5 activos y 10 contenidos. El siniestro que afectaba la comuna de Lumaco, que dañó 500 hectáreas, fue contenido. Los que se presentan en Carahue, que han destruido 2.285 hectáreas y que costaron la vida a los siete brigadistas, se mantenían sin control.
En Torres del Paine, en tanto, aún se mantenía un foco fuera de control y 15.113 hectáreas han sido destruidas. Se prevén lluvias débiles durante la mañana, "que esperamos contribuyan a la extinción de dicho foco", señaló Núñez.
El director de la Onemi hizo un reconocimiento "a los cientos y miles de brigadistas que nos han acompañado y que llevan días trabajando", de Conaf, las empresas forestales, del Ejercito y la Armada, de Bomberos, el personal municipal, y los efectivos de Carabineros y la Policía de Investigaciones que han prestado colaboración en las tareas de extinción, así como las unidades de otros países que han ayudado a combatir la emergencia.