SANTIAGO.- La Tercera Brigada de la Fuerza Aérea y la Armada iniciaron un operativo de búsqueda para dar con los restos de una avioneta, que preliminarmente viajaba con al menos siete ocupantes y que cayó al mar en el golfo Corcovado, en la Región de Los Lagos.
La información fue confirmada a Emol por la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC).
Se trata de una avioneta de la empresa "Aerohein", que realizaba el viaje desde Melinka a Quellón y que por causas que se investigan se precipitó al mar, lo que según radio Bío Bío, fue avistada por los pasajeros de una embarcación, los que dieron aviso a las autoridades.
Por su parte, Radio Quellón informó que entre los ocupantes de la avioneta siniestrada estarían un empresario, su hijo y buzos de la empresa.
El comandante de Carabineros, Daniel Zalinovic, precisó en entrevista con TVN que el aparato es un Piper Navajo, que inició su viaje a las 11:50 horas y que a las 11:56 fue el último contacto.
"El viaje entre Melinka y Quellón dura entre 15 a 20 minutos y hasta ahora no ha habido contacto con nadie del avión y es por eso que se inició el operativo de búsqueda", señaló el jefe policial.
Zalinovic agregó que la búsqueda puede verse dificultada por el clima adverso imperante a esta hora en la zona en que cayó la aeronave.
El general de la Tercera Brigada Aérea de la FACh, Juan González, informó que el piloto de la nave siniestrada fue identificado como Ricardo Hein y que para la búsqueda cuentan con dos aeronaves de la institución, más un helicóptero de la Armada.
En abril de 2009 la misma empresa protagonizó un accidente con resultados fatales, ésta vez en la zona costera de Valdivia, en la Región de Los Ríos.
En esa oportunidad, la nave iba con tres ocupantes, uno de los cuales falleció producto de las graves lesiones con que quedó.
La víctima fue identificada como Jens Wendt, ciudadano alemán, de 43 años, perteneciente al Centro de Estudios Científicos del Sur (CECS).
Los otros dos ocupantes José García Hein y Lautaro Medina, este último piloto de la avioneta, quien logró mantener contacto telefónico con la Central de Comunicaciones (Cenco) de Carabineros de Valdivia, fueron derivados hasta el Hospital Regional de Valdivia.