SANTIAGO.- Hoy en la tarde Monseñor Ricardo Ezzati visitó a Marcela González, la joven de 16 años a la que se le debió practicar una cesárea durante un trasplante de hígado.
En la cita, el Arzobispo de Santiago hizo un llamado para la donación de órganos "cuando ya no sirven para la vida de uno y pueden servir para la vida de los demás", constituya una cultura entre los chilenos.
La joven se está sometiendo continuamente a exámenes y según lo señalado por sus doctores, las próximas horas son críticas en su evolución.
Debido a una complicación en el trasplante fue necesario que los médicos le hicieran una cesárea a la joven, provocando que su hija Dominique, naciera prematura y pesando sólo 733 gramos.
En el caso de la recién nacida, lo doctores señalaron que se encuentra evolucionando de manera estable.