Tras una larga reunión, Iván Fuentes mostró anoche la disposición al diálogo del movimiento social.
Claudio Frías, El MercurioSANTIAGO.- Luego que dirigentes del movimiento social en Aysén hicieran saber anoche que están abiertos a continuar las tratativas en Coyhaique, el ministro de Energía, Rodrigo Álvarez, se mostró escéptico de la real disposición al diálogo de los integrantes de su mesa directiva e insistió que el trabajo en distintas mesas es la única forma de avanzar en la solución de los diferentes problemas.
Álvarez dijo esta mañana en radio Cooperativa que "como estamos muy lejos de alcanzar un acuerdo en materia de combustibles, el Gobierno era partidario de avanzar en otros temas como transporte, educación (...). Las mesas separadas permiten ir avanzando en materias técnicas".
El secretario de Estado fue un poco más allá y respecto a que las conversaciones se concreten y lleguen a buen término, como pretenden los directivos sociales que encabeza Iván Fuentes, sostuvo que "tenemos que comprobar las declaraciones que hemos venido escuchando, porque ayer nos decían que bajo ningún aspecto se juntaban a conversar en Coyhaique, y al mismo tiempo bajo ningún aspecto conversaban si no se avanzaba primero en los combustibles".
Anoche, Fuentes insistió en que el tema de los combustibles es el principal y que una vez resuelto, destrabará las conversaciones y dará pie a las negociaciones sobre el resto de sus demandas.
"Hemos dicho siempre que estamos dispuestos al diálogo, y en ese mismo afán de diálogo queremos que el Gobierno sepa que esa voluntad está asegurada, la voluntad de conversar está asegurada, la disponibilidad de que ellos vengan para acá. La Patagonia siempre ha estado dispuesta", agregó Fuentes.