SANTIAGO.- En medio de las diligencias para esclarecer la confusa balacera ocurrida en San Joaquín, la Policía de Investigaciones (PDI) aseguró que la mortal balacera en la que murió un carabinero a manos de detectives fue un hecho "aislado".
El jefe metropolitano de la policía civil, inspector Guillermo Alarcón, "lamentó el incidente", subrayando que "para nada empaña las relaciones excelentes que tenemos" entre instituciones.
Según la autoridad de la PDI, "ya hay una investigación a cargo del OS-9 y el Laboratorio de Criminalística de Carabineros, y nosotros, como Policía de Investigaciones, vamos a colaborar en toda la investigación para esclarecer fehacientemente los hechos".
Al mismo tiempo, añadió Alarcón, se abrió un sumario interno para "establecer las responsabilidades administrativas" respecto a lo sucedido.
A su turno, el jefe de la Zona Metropolitana de Carabineros, Luis Valdés, detalló que el cabo fallecido, identificado como el Miguel Faúndez Morales, "tenía 21 años de edad, dos años de servicio, (era) padre de una menor de cuatro meses".
Durante la balacera, otros dos policías resultaron heridos de bala: Marcelo Molina, de la PDI, y Rodrigo Chávez, de la institución uniformada.