SANTIAGO.- El ministerio de Salud (Minsal) dio inició a la segunda fase de su programa de control del brote Coqueluche con la vacunación de adolescentes de 13 años.
El subsecretario de Salud Pública, Jorge Díaz, informó este martes que a partir de la próxima semana unos 35 mil alumnos de este grupo etáreo del Biobío serán vacunados contra la tos convulsiva o llamada también coqueluche en los colegios de esa región y gradualmente en el resto del país.
En agosto la inoculación se replicará en Los Lagos, en septiembre en O'Higgins, y a partir de 2013 a todos los jóvenes de esa edad en el resto del país.
La vacuna protege contra todas las formas más grave de la enfermedad, aminorando la necesidad de hospitalización, la aparición de complicaciones y la letalidad, todo esto debido que a partir de 2010 se registró un aumento de notificaciones por tos convulsiva, y que también se vio en otros países como Estados Unidos, Canadá, Argentina y Colombia.
Si en 2009 había 4,1 casos de contagiados con Coqueluche por cada 100 mil habitantes en Chile, a fines de 2010 la cifra se elevó a 15 casos por cada 100 mil. Este año se ha registrado un estancamiento del brote en las regiones Metropolitana y Valparaíso, pero se mantiene alto en el Bío-Bío. Un 75% de los casos notificados corresponden a niños menores de seis meses.
El subsecretario Díaz se refirió a esto junto a la directora de Instituto de Salud Pública (ISP), María Teresa Valenzuela, el presidente de Comité Asesor en Vacunas (Cavei), Jorge Jiménez de la Jara y el presidente de la Sociedad Chilena de Infectología, doctor Mario Calvo.
Valenzuela explicó que la tos convulsiva es una enfermedad respiratoria grave en los lactantes, menores de seis meses, que se caracteriza por una crisis de tos, después llega un período de apnea, fiebre alta y puede llevar a la muerte.
Por su parte, el doctor Jiménez explicó que en el Biobío en 2011 se estableció la estrategia capullo que consistió en vacunar a la madre del recién nacido y a todos los familiares directos mayores de 12 años, que vivían bajo el mismo techo del lactante.
La estrategia se amplió a las otras regiones afectadas, Valparaíso, O'Higgins, Metropolitana y a partir de marzo de este año en el Biobío.
Actualmente la vacuna contra la tos convulsiva, llamada DPT, está dentro del Programa Nacional de Inmunizaciones (PNI) y se coloca a los niños a los dos, seis y 18 meses y posteriormente un refuerzo a los 6 años. No obstante, la inmunidad de la vacuna se estima dura cerca de 10 años después de la última dosis, y es por eso que las autoridades de salud decidieron colocar una nueva dosis a los 13 años de edad.
El doctor Jiménez dijo que "los adultos que están criando guaguas deben vacunarse contra la tos convulsiva para apoyar el corte contra la transmisión de la cadena".