El vehículo en el que viajaban los turistas quedó completamente destrozado.
Imagen de TV: OneNewsSANTIAGO.- Un turista chileno sufrió lesiones graves y se encuentra en estado crítico en Nueva Zelandia luego de un violento accidente de tránsito en el que fallecieron cuatro personas, según informes de autoridades.
La colisión ocurrió pasadas las 22:00 horas del martes (en Nueva Zelandia) en las cercanías de Ohakune, situada en la Isla Norte, al suroeste del lago Taupo.
Las cuatro víctimas fatales son de nacionalidad argentina. Fueron individualizados como Germán Cáceres, de 35 años; Nicolás Ursic, de 27; Agustín Donofrio, de 25, y Luciano Pucheta, de 19 años.
El ciudadano chileno que viajaba junto a ellos, de 26 años de edad, fue identificado por medios de prensa neocelandeses como Benjamin Blake, de 26 años.
El joven permanece en estado grave en un hospital de la ciudad de Hamilton, según confirmó a Emol el embajador chileno en Nueva Zelandia, Isauro Torres.
"Estamos preocupados de mantener a la famiilia informada del estado de salud. Se encuentra en una unidad de cuidados intensivos", afirmó.
Torres añadió que las autoridades neocelandesas han prestado toda la colaboración posible en este caso.
"Como si hubieran soltado una bomba"
El turista chileno debió ser trasladado por vía aérea al centro asistencial en el que recibe atención médica y se encuentra en condición crítica, según el diario "NZHerald".
El espectacular accidente ocurrió en la Carretera Estatal 4, entre National Park y Ohakune, cuando un camión maderero que arrastraba un remolque embistió el station wagon en el que viajaban las víctimas.
Según informes policiales, la colisión ocurrió cuando el vehículo de los turistas intentaba adelantar a otro automóvil en una cuesta.
El station wagon fue arrastrado varios metros por el camión y quedó casi totalmente destruido.
El grupo regresaba de disputar un partido de baby fútbol en la localidad de Ohakune y regresaban a sus habitaciones en National Park cuando ocurrió la tragedia, explicó el inspector Steve Mastrovich, de Taumarunui.
El hecho causó conmoción en Nueva Zelandia debido a la violencia de la colisión. La escena fue descrita por la policía como si alguien "hubiera soltado una bomba" en el lugar.
Un testigo, Colin Fredricksen, propietario de una grúa que colaboró en el rescate de los cuerpos desde los restos metálicos, dijo que el accidente "es el peor que he visto en este sector en 30 años", en declaraciones a medios locales.
La noticia se convirtió durante la jornada del miércoles en la más vista en distintos portales de noticias de ese país.