''Siempre cuando hay un posible abuso de un menor de edad es una mala noticia para la sociedad, para la familia y para la Iglesia'', señaló Jaime Coiro.
Cesar Silva, El MercurioSANTIAGO.- El vocero de la Conferencia Episcopal, Jaime Coiro, junto con calificar de "muy dolora" la denuncia de abuso sexual en contra de una menor que enfrenta el sacerdote legionario John O'Reilly, señaló que la decisión del Colegio Cumbres femenino de suspender de sus funciones al religioso mientras se aclare el caso, está en línea con los protocolos adoptados por la iglesia en este tipo de situaciones.
"La Iglesia desde el año 2003 tiene un protocolo, un procedimiento judicial interno para estas materias y desde el año 2011 este protocolo actualizado incluye un acompañamiento a las víctimas y también medidas de prevención", explicó Coiro al sitio "24horas.cl ".
En ese sentido, el vocero sostuvo que "siempre cuando hay un posible abuso de un menor de edad es una mala noticia para la sociedad, para la familia y para la Iglesia".
"Lo importante -agregó- es que esta denuncia está conducida según la legislación vigente en Chile y sólo nos resta confiar en la labor de las instancias que lo investigan -tanto en la justicia penal y la justicia canónica- y que en un tiempo breve puedan llegar a la verdad".
Respecto de la acusación en contra de O'Reilly, Coiro pidió mesura. "En las denuncias que se interponen asiste el derecho del denunciado de ser estimado inocente hasta que no se demuestre lo contrario. Tampoco podemos convertir ese derecho en un pretexto para no creer en los denunciantes y hay que manejarlo con mucho cuidado y especial cercanía a las personas que hacen la denuncia. Entiendo es el tenor de las medidas que ha tomado el Colegio Cumbres en este caso también".