SANTIAGO.- Decenas de apoderados del colegio Mater Purissima de Maipú protagonizaron una manifestación en contra de la parvularia Ana María Rivas, quien fue enviada a un centro penitenciario luego de que la Corte de Apelaciones de Santiago revocó la prisión preventiva que la favorecía.
La educadora fue trasladada hasta el anexo femenino del penal de San Miguel por efectivos de la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales de la Policía de Investigaciones.
Durante el operativo, los apoderados rodearon los vehículos policiales y expresaron su satisfacción por la medida judicial.
Al mismo tiempo, los manifestantes desplegaron un cartel de grandes dimensiones con la leyenda "No a la pedofilia en Chile" y denunciaron la falta de rigor en la persecución de los abusos contra menores en el país.
"Qué ha hecho el gobierno sobre la pedofilia: Nada. Que el gobierno ponga mano dura contra estos delitos", declaró una apoderada, en declaraciones al noticiario "Última Mirada" de Chilevisión.
Este jueves, la Primera Sala del tribunal de alzada dejó sin efecto
las medidas cautelares y decretó prisión preventiva sobre Rivas, luego de recibir nuevos antecedentes sobre el caso entregados por la fiscalía. También la consideró un "peligro para la sociedad".
La parvularia es acusada de cometer abusos sexuales contra una niña de 5 años. También se investiga la participación en el delito de María Soledad Martínez Sepúlveda, auxiliar de aseo del establecimiento.