SANTIAGO.- El proyecto de ley que busca endurecer las sanciones contra los agresores y asesinos de carabineros, no incluye reestablecer la pena de muerte, pero sí el presidio perpetuo efectivo (40 años de cárcel), aclaró esta mediodía el diputado Gustavo Hasbún (UDI).
La confusión se debió a un error en la redacción de un comunicado, enviado desde la sala de prensa del partido oficialista, agregó el parlamentario.
Respecto de la investigación, el principal sospechoso del crimen cometido el 11 de septiembre, en Quilicura, tiene 16 años y registra tres detenciones previas.
En tanto, la pericia realizada a la bala que mató al cabo, reveló que ésta estaba modificada para provocar más daño.
El proyectil tenía cortes artesanales en la punta para que una vez ingresado en el cuerpo se fraccionara y fuera más letal.