César Silva, El Mercurio
SANTIAGO.- Ante la ausencia de dirigentes de la Concertación en los actos oficiales de Fiestas Patrias, los partidos de la gobernante Coalición por el Cambio coincidieron en que ello demostró la 'escasa' representación que en la actualidad tiene el bloque opositor, y la presunta incapacidad que tiene para plantearse al país como fuerza política.
El presidente de la UDI, diputado Patricio Melero, sostuvo a Agencia UPI que "hoy día hablar de Concertación es un engaño al país, puesto que se ha desdibujado totalmente la capacidad que tienen de enfrentar en conjunto los desafíos de Chile" y, según su opinión, para dar garantías de gobernabilidad.
Melero expresó que este conglomerado "ya no es lo mismo que fue, ni volverá a serlo". Y manifestó que el "giro a la izquierda que ha tomado un sector muy importante" de esta coalición, ha terminado por desperfilarlos frente al centro político del país, y eso es lo que ahora les está afectando, afirmó.
El timonel del gremialismo aseveró también que a la falta de representantes del bloque opositor durante los diversos actos de las festividades patrias, se suma la forma poco adecuada y "de enfrentamiento que han tenido como oposición". Y lamentó su ausencia, más aún cuando los mensajes desde las iglesias se dirigieron al mundo político y se hicieron en el marco de "generar un mayor grado de unidad en los grandes propósitos que convocan a los partidos y en los desafíos futuros", manifestó.
Carlos Larraín se suma a las críticas
El presidente de Renovación Nacional, senador Carlos Larraín, en tanto, señaló a UPI que "efectivamente la Concertación tiene un tremendo rechazo y una baja tasa de apoyo en la opinión pública".
Además, señaló que si se quiere encontrar adherentes de este bloque, "hay que ir a la administración pública, ahí no faltan. Son sobrevivientes del antiguo régimen", apuntó.
Larraín añadió que la actitud demasiado negativa que habría tomado la Concertación durante el gobierno de Sebastián Piñera, es la que "les ha pasado la cuenta".
Para el senador, el conglomerado ha bajado tanto en el apoyo ciudadano porque en las dos décadas de sus gobiernos hubo muchas expectativas frustradas producto de promesas que no se llevaron adelante y, "sin embargo, cuando llegamos nosotros al Ejecutivo, tenemos que hacer todo lo que no se hizo en 20 años. Se nos pide una velocidad vertiginosa que ellos no pudieron desarrollar", acotó.