SANTIAGO.- Un día después de que la Iglesia Católica diera a conocer su Carta Pastoral de 2012 y criticara la desigualdad del país, el ministro secretario del Gobierno (Segegob), Andrés Chadwick, salió al paso de las conclusiones del Comité Permanente de la Conferencia Episcopal.
"Las palabras y los contenidos que han hecho llegar los obispos nos interpretan, nos exigen y nos desafían en un punto central para el Gobierno: junto al desarrollo económico, vayamos avanzando juntos", dijo.
En alocución en La Moneda, el portavoz de La Moneda aseguró que si bien "hemos avanzado mucho", el desafío es "que ninguna familia se nos vaya quedando atrás: gente que todavía no puede lograr los beneficios que le permitan superar la extrema pobreza, superar la pobreza y mejorar sus condiciones de vida".
"(Ojalá) ya pronto podamos llegar con todos los beneficios del desarrollo y la acción del estado a esas familias", añadió Chadwick, apuntando a mejoras en todo nivel.
"Usando las mismas palabras de ellos, que el desarrollo sea integral (...) avanzar, avanzar todos juntos y que el desarrollo sea un concepto integral y no meramente el crecimiento sea una cifra aislada", reiteró.
Ayer, el arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, aseguró que Chile ha sido uno de los países donde se ha aplicado con "mayor rigidez y ortodoxia un modelo de desarrollo excesivamente centrado en los aspectos económicos y en el lucro, sin poner atención a sus consecuentes tensiones y desigualdades escandalosas entre ricos y pobres".
"Hoy escandalosamente en nuestro país muchos trabajan y, sin embargo, son pobres y esto ha afectado el fondo de la vida familiar", concluyó.