SANTIAGO.- A poco más de un mes de ocurrida la tragedia, los informes toxicológicos descartaron finalmente la presencia de fármacos en los cuerpos de los hermanos Ramírez Merchack, quienes la noche del 29 de agosto fueron asesinados por su padre, en Curicó.
"Se ha determinado por parte del Servicio Médico Legal, que no había ningún tipo de consumo de droga o medicamento en los jóvenes fallecidos como consecuencia del parricidio que se está investigando", afirmó el fiscal jefe de la ciudad, Miguel Gajardo, a cargo de la investigación.
Sin embargo, el análisis realizado al victimario, el doctor Francisco Ramírez, sí arrojó la presencia de un compuesto médico en su sangre.
"Se descubrió un medicamento que es de uso normal, utilizado para los tratamientos psicológicos o psiquiátricos. Ello se está averiguando para saber si habría sido recetado por algún facultativo o habría sido dado por él (...) Se llama Lamatrigina", explicó.
Dicho fármaco actúa como estabilizador del ánimo, además de resultar efectivo para el mantenimiento del trastorno bipolar y controlar la epilepsia.
Las diligencias aún no terminan en torno a la muerte de las cuatro personas. Ahora, se trabaja en los informes psiquiátricos y psicológicos de Ramírez.