Íñigo Díaz indicó que los actuales miembros de la Comisión Nacional de Acreditación "siguen trabajando, en un ambiente muy desagradable".
El MercurioSANTIAGO.- El ex presidente de la Comisión Nacional de Acreditación (CNA), Íñigo Díaz –quien sucedió en el cargo al cuestionado Eugenio Díaz– sostuvo que las presuntas irregularidades en que incurrió su antecesor constituyen un "caso muy aislado" al interior del organismo.
"Yo estoy convencido de que es un caso único y muy aislado el de Eugenio Díaz, en que se establecen relaciones indebidas con instituciones (…) Yo sigo poniendo las manos al fuego sobre los actuales comisionados", afirmó Díaz a radio ADN.
Afirmó que actualmente los 15 comisionados "siguen trabajando, en un ambiente muy desagradable, pero siguen haciendo las cosas que tienen que hacer".
Íñigo Díaz renunció a su cargo en octubre pasado aludiendo a motivos personales y a que no logró tener una adecuada relación con el Ministerio de Educación y con el Consejo Nacional de Educación.
Hoy, ante las graves irregularidades que investiga la Fiscalía y el negativo informe de la Contraloría sobre los procedimientos de la CNA, el académico reconoció que "es muy probable que haya que hacer una reformulación bastante profunda" al organismo. "Modificar la ley que nos rige es una exigencia", afirmó.
Indicó que cuando fue presidente del organismo una de sus preocupaciones fue precisamente que "el sistema no perdiera la confianza con los usuarios".
Por esto durante su gestión –en conjunto con el vicepresidente y el secretario ejecutivo, Patricio Basso– plantearon formular una ley corta que abordara los cambios más urgentes, como la fijación de estándares mínimos en la acreditación institucional y cambios a la forma en que se nombraba a los comisionados.
Sin embargo, sostuvo que "desgraciadamente el ministerio, entre otros, dijo que eso no era bueno porque el tema lo veíamos dentro de la urgencia y la oportunidad de hacer los cambios… Y ocurrió lo que está ocurriendo".
Pese a esto, manifestó que "hoy día yo espero que haya intenciones y voluntad de cambiar la ley".
No obstante, Íñigo Díaz, si bien reconoce que es necesario modificar el actual sistema de designación de los miembros de la CNA, dice no ser partidario de que sea a través del sistema de Alta Dirección Pública, como plantea el Ministerio de Educación.
"Yo creo que va a ser peor el remedio que la enfermedad. La Alta Dirección Pública en muchos de los casos no es capaz de elegir a las personas idóneas. Nosotros no podemos nombrar personas que no tengan ninguna relación con el sistema, no podemos nombrar personas absolutamente neutras. Para ser acreditador tenemos que conocer el sistema de educación superior", afirmó.
A su juicio, el nuevo mecanismo debiera incluir "comités de búsqueda" con personas expertas en la materia que puedan escoger a su vez a los más capacitados.