Los líderes de la DC llamaron a la cúpula del Partido Comunista a aclarar si comparten los dichos de Camila Vallejo, quien competirá por un cupo en el Parlamento.
El MercurioSANTIAGO.- Con indignación reaccionaron hoy los principales líderes de la Democracia Cristiana (DC) ante las polémicas declaraciones de la dirigente comunista, Camila Vallejo, quien señaló que su partido, en caso de llegar al Gobierno con la Concertación, tendrá un pie en la calle, apoyando las protestas sociales, y otro en La Moneda.
La ex presidenta de la FECh, en entrevista con "La Tercera", también señaló que en caso de postular al Parlamento apoyada por el ex bloque gobernante, no significa que el PC apoyará al candidato presidencial de la Concertación.
"Bachelet dijo 'nos vemos en marzo', no puedo asegurar que apoyaré a Bachelet cuando ella no está diciendo nada y no hay un programa en común", señaló Vallejo.
Para el presidente de la DC, Ignacio Walker, lo que dice la ex líder estudiantil, a su juicio, refleja un "débil compromiso" de los comunistas con la institucionalidad del país.
"Lo que Camila Vallejo está señalando y ratificando, dice relación con un muy débil compromiso, por decirlo suave, de una eventual participación del PC en un futuro gobierno (de la Concertación)", dijo el senador a "La Segunda".
En el mismo tono, Walker advirtió que Vallejo "nos está anticipando que una eventual participación del PC en un futuro gobierno se puede convertir en una bomba de tiempo y en el verdadero talón de Aquiles de esa futura administración".
"Me gustaría saber si ésta es la postura oficial del PC", finalizó Walker, emplazando a aclarar al presidente de los comunistas, Guillermo Teillier, los dichos de Vallejo.
En tanto, el vicepresidente de la DC, Jorge Burgos, dijo que con este tipo de declaraciones, un eventual pacto político junto al PC "es bien difícil de resolver, creo que no tiene posibilidad".
Además, lamentó el tono triunfalista de algunos sectores de la izquierda de cara a las elecciones presidenciales, recordando que el triunfo de Bachelet no está garantizado, tomando en cuenta que al Gobierno de Piñera "en el último tiempo no le ha estado yendo mal".