El fiscal nacional recibió a la ministra Carolina Schmidt, para abordar el caso de la U. del Mar.
MineducSANTIAGO.- El fiscal nacional, Sabas Chahuán, anunció que todas las investigaciones por estafa y defraudaciones económicas en perjuicio de los estudiantes de la Universidad del Mar serán indagadas por un equipo especial, radicado en la Fiscalía Regional de Valparaíso, con el fin de que la investigación sea más expedita.
"Los delitos de estafa, delitos propiamente económicos, he adoptado la decisión de agruparlos con un equipo de cuatro fiscales, liderados por el fiscal regional de la Quinta Región (Pablo Gómez), para que sea más expedita la investigación (…) Dentro de la escasez de recursos que tenemos, se debe reasignar y formamos este equipo especial", explicó Chahuán.
El grupo estará integrado por los fiscales jefe de Valparaíso, Cristián Andrade, de Viña del Mar, Pablo Avendaño, el abogado asesor de la Fiscalía Regional, Freddy González, y otros dos fiscales adjuntos especializados en delitos económicos, que se designarán en los próximos días.
Dicho equipo estará en coordinación con el fiscal Carlos Gajardo, de la Fiscalía Oriente, quien encabeza las investigaciones por las irregularidades detectadas en el proceso de acreditación de algunas universidades, entre las cuales se encuentra la Universidad del Mar. El fiscal nacional aclaró que la arista relacionada con el lucro en la educación superior seguirá siendo investigada por el fiscal Gajardo.
"Lo importante es que las personas tengan claro que si hay algún delito, la Fiscalía lo va a investigar, sobre todo en tipos de delitos que van más allá de un delito común. Es un delito complejo de investigar, porque defrauda a mucha gente y en el que se mueve gran cantidad de dinero", señaló Chahuán.
El fiscal nacional recibió hoy a la ministra de Educación, Carolina Schmidt, quien le proporcionó nuevos antecedentes sobre la venta de la sede Punta Arenas de la Universidad del Mar –que se concretó en diciembre pasado por un monto de $900 millones–. La ministra detalló que dicha sede fue vendida incluso con todos los registros de los estudiantes.
"Los controladores y administradores han vendido la sede de Punta Arenas con todos los antecedentes y documentos de los alumnos, con los computadores, con las bibliotecas y todo lo necesario para que los alumnos se puedan graduar en la universidad, tal como está establecido en el proceso de cierre", detalló la ministra.
Por esa razón, le solicitó al persecutor que "se investigue y sancione con urgencia a los controladores y ex administradores de esta universidad, por los graves daños ocasionados a miles de familias y estudiantes del país".
También denunció el no pago de cotizaciones a los funcionarios del plantel, la falta de campos clínicos y una administración fragmentada que tenía a este plantel dividido en 14 universidades distintas, además del abandono del proyecto educativo.