Ana Luisa Jouanne también recordó que el polémico informe de la OEA que plantea despenalizar drogas, propone soluciones para países con alto nivel de narcotráfico, que no es el caso de Chile.
Christián Zúñiga, El MercurioSANTIAGO.- Ana Luisa Jouanne, directora ejecutiva de la Corporación La Esperanza, calificó como "graves" las declaraciones del ministro de Salud, Jaime Mañalich, quien se mostró partidario de despenalizar el consumo privado de "ciertas drogas", especialmente la marihuana, como lo recomienda un informe de la Organización de Estados Americanos (OEA).
"Aunque el Gobierno hizo una rectificación (de las declaraciones de Mañalich), igualmente me parece grave que el ministro de Salud en Chile haga una declaración de esta naturaleza, porque confunde a la opinión pública", enfatizó.
"Chile es de los pocos países donde no está penalizado el consumo. Lo que tenemos que hacer es que efectivamente no haya ningún consumidor en la cárcel, porque a veces se da la doble condición de microtraficante y consumidor", añadió la directora de la ONG privada, que hace 15 años rehabilita gratuitamente a personas de escasos recursos que sufren adicción a las drogas.
"Creo que él (el ministro Mañalich) está confundido con los conceptos que está entregando", agregó. "Lo primero que debe despejar un gobierno es si la droga hace daño, y partir de eso, ver qué políticas públicas van a mejorar la situación y, concretamente, a desincentivar y a disminuir el consumo".
Jouanne consideró que las declaraciones de Mañalich son graves y confusas "porque plantea su preocupación por las personas adictas, pero cuando se facilita el consumo, lo probable es que al menos en adolescentes y jóvenes aumente el consumo".
Informe OEA: "Soluciones no son las mismas"
Respecto del informe de la OEA al que aludió el titular de Salud, la directora ejecutiva de la Corporación La Esperanza señaló que dicho documento basa su diagnóstico y propuestas en países con serios problemas de narcotráfico y violencia.
En ese aspecto, Jouanne recordó que participó recientemente en el Décimo Foro Hemisférico de la Sociedad Civil organizado por OEA para entregar su opinión sobre la materia.
"La preocupación más importante de la sociedad civil en los países centroamericanos y de los que son productores de drogas es la violencia que genera el narcotráfico. Pero países como Chile tenemos otro problema, que se llama consumo. Por lo tanto, las soluciones no son las mismas", agregó.
Frente a esto, la Corporación Esperanza sostiene que la primera medida para Chile debiera ser la prevención obligatoria, con un mensaje potente y claro para aumentar la percepción de riesgo que integre a todos los actores sociales y que, en definitiva, apunte a bajar los niveles de consumo.
"El mensaje que debe entregarse es que la droga sí hace daño. Esto hoy no existe, no está en la agenda pública, no está en los ministerios. Eso es lo distinto que podrían tener los países centroamericanos de los que somos consumidores", enfatiza.
Sobre la despenalización del autocultivo, Ana Luisa Jouanne advierte que también implica problemas relacionados con la adicción, debido al riesgo de que se cultiven los tipos de cannabis con mayor nivel de THC, como las variedades skunk o white widow, que contienen de 10% a 30% de este psicoactivo.
"En Europa ha subido la demanda por tratamiento de personas que tienen adicción a la marihuana. Por eso nos oponemos al autocultivo. Tal vez deberíamos analizar los ensayos en Israel, donde apareció hace poco información de marihuana sin THC, solo con canabidol", explicó.
"Eso significa que toda la línea tóxica que tiene la marihuana se ha logrado aislar y ha mantenido esas bondades que tiene que ver con aspectos terapéuticos. Es un avance bioquímico y ya han tratado a 9.000 personas de esa manera. Si hoy de verdad existe la intención de buscar soluciones de tipo terapéutico, quizá hay que irs por esa línea, sin debilitar la estructura de prevención que tienen que tener especialmente los escolares y jóvenes", finalizó.