Caso Tsunami: El testimonio judicial del Almirante González respecto a la actuación del SHOA

SANTIAGO.- "Toda la responsabilidad es mía y me siento en paz". Con esas palabras, el comandante en jefe de la Armada Edmundo González se refirió –en el día de las Glorias Navales- a la serie de errores que la madrugada del 27-F se cometieron en su institución tras el terremoto  y posterior tsunami que dejó 156 personas fallecidas y 25 desaparecidos.

"He dado mi batalla y he luchado sin descanso ni mezquindades por lo que he creído correcto y necesario", agregó en su último discurso –deja su cargo en junio-, enfatizando que aquel fatídica noche "nos vimos enfrentados, sin previo aviso y en el peor período del año, a serias y difíciles exigencias".

Sus afirmaciones generaron que uno de los querellantes en la causa, el abogado Raúl Meza, solicitara ante la Fiscalía Naval que la máxima autoridad de la Armada declarara con el objetivo de explicar qué quiso decir exactamente en su discurso, ya que en el testimonio que entregó en enero de 2012 ante la fiscal Solange Huerta -quien encabeza la investigación penal respecto a la fallida alerta de tsunami- no reconoció responsabilidades.

De acuerdo a este testimonio -al que tuvo acceso Emol- el Almirante González especificó que el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA) "pertenece a la Armada de Chile y en el organigrama de nuestra institución al 27 de febrero de 2010 se encontraba bajo dependencia directa del Estado Mayor General de la Armada, pero en el aspecto militar".

"Pero desde el punto de vista técnico, por la función que realiza el SNAM (Sistema Nacional de Alarma de Maremoto), en caso de una emergencia, se relacionan directamente con el Sistema de Protección Civil, a través de la ONEMI, por lo que dicha función técnica es autónoma", detalló.

Agrega en su declaración que "por lo anterior, yo no debía ni debo interferir en las decisiones técnicas del Director del  SHOA", enfatizando que "de allí que el 27 de febrero de 2010 no me haya comunicado directamente con Mariano Rojas, salvo cuando él me llamó o cuando nos reunimos antes de partir a Talcahuano".
 
En la misma línea aclaró que "si yo hubiese tenido información del tsunami más temprano y hubiese detectado el error que estaba cometiendo el SHOA, aunque no era mi función, le habría advertido esta situación para que enmendaran el error".

En su testimonio, González también estableció que la madrugada del 27-F  al momento del sismo,  se encontraba junto a su esposa en su domicilio ubicado en el Complejo Caleta Tridente, en la población Naval Fuerte Vergara de Las Salinas, en Viña del Mar, lugar donde luego del terremoto estableció su puesto de mando.

Asimismo reafirmó que esa noche "la Armada se encontraba representada en la ONEMI  a través del Jefe de Estado Mayor Conjunto, el General Ledantec, conforme a la legislación vigente, ya que en un Estado de Guerra o Emergencia, todas las Fuerzas Armadas se subordinan al Jefe de Estado Mayor Conjunto en aquellas funciones que colaboran en la emergencia o guerra".

Por último, el comandante en jefe se refirió ante la fiscal respecto a su encuentro con el director del SHOA, Mariano Rojas, a las 11 horas del 27 de febrero en el aeródromo Naval de Concón. "Cuando me junté con él le pedí una explicación , quien trató de hacerlo señalándome que la Alerta se había dado de manera acertada por parte del Oficial de Guardia del SHOA, Teniente Andina,  pero más tarde él decidió cancelarla porque no tenía información de campo que le indicara otra cosa y que los mareográfos no le indicaban variaciones de marea".

"Entonces yo le dije que el hecho de no tener contacto con los observadores en terreno era algo que debió haberlo motivado para mantener la Alerta, es decir, ante la duda mantengo", estableció.