Los estudiantes sostienen que la gratuidad debe ser con aportes directos a las universidades, y que el lucro debe terminar en todo el sistema.
El MercurioSANTIAGO.- Con "sorpresa" y muchas interrogantes recibieron los estudiantes el anuncio de la candidata presidencial Michelle Bachelet de que en su eventual Gobierno se avanzará hacia la gratuidad universal en la educación, en un plazo de seis años, y el término del lucro.
A juicio de los dirigentes estudiantiles, este anuncio refleja la fuerza con que han irrumpido las demandas del movimiento estudiantil en el debate político, pero advierten que no basta con promesas ni "ofertones" en un año electoral, sino que éstos se deben avalar con hechos.
"Es una sorpresa obviamente, que refleja cuan ineludible se han convertido las propuestas del movimiento estudiantil y cuan desgastado está el actual modelo que entiende la educación como un negocio", señaló el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECh), Andrés Fielbaum.
No obstante, sostuvo que "en política lo que valen son los hechos y no las promesas". "Nosotros hemos crecido viendo que en los años electorales los ofertones llegan, pero uno se da cuenta que las promesas en años electorales valen bien poco", señaló.
Respecto del anuncio de la candidata de alcanzar la gratuidad universal en la educación superior –llegar al 70% en 4 años y al 100% en 6 años–, el líder de la FECh dijo que es necesario saber si esto se pretende lograr a través de becas a los estudiantes –vía que ellos rechazan– o mediante aportes directos a las universidades.
"Cuando ella habla de que va a partir con un 70% (de gratuidad), uno supone que está pensando en becas. A nosotros no nos interesan las becas, no nos interesa seguir llenando formularios para ver dónde cabe uno. Lo hemos dicho bien claro: Becas no es gratuidad. Lo que nosotros queremos son aportes directos a las instituciones, para que no tengan que funcionar bajo la lógica de la competencia del mercado, sino que puedan abocarse exclusivamente a su labor educativa", afirmó.
También manifestó sus dudas respecto del anuncio de poner fin al lucro, ya que ellos abogan por que éste se prohíba en todo el sistema educativo y no sólo en las instituciones que reciben fondos públicos.
"Queremos ver las especificidades de este asunto, porque Michelle Bachelet ha confundido varias veces 'fin al lucro' con 'fin al lucro con fondos públicos', que es bien diferente, porque esto último sigue permitiendo que existan casos como la Universidad del Mar sólo que sin recibir platas estatales. Lo que a nosotros nos interesa es que ningún establecimiento priorice retirar utilidades por sobre invertir en profesores o bibliotecas", explicó.
"Los estudiantes hemos corrido el límite de lo posible"
Algo más optimista se mostró el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica (FEUC), Diego Vela, quien destacó que el anuncio refleja que "los estudiantes hemos cambiado el límite de lo posible en el país". "Es positivo que los candidatos se empiecen a pronunciar sobre estos temas de fondo, sobre todo cuando se trata de avanzar en el derecho a la educación", señaló.
Pese a esto, también manifestó cautela respecto a que esta promesa efectivamente se cumpla, pues recordó el desenlace de la movilización "pingüina" de 2007, donde el movimiento estudiantil se sintió traicionado por la entonces Presidenta. "Nosotros no nos olvidamos de la historia y lo que vivimos en 2007, donde un proyecto de ley que podría haber sido positivo terminó aumentando la segregación y el negociado en la educación", señaló.
Por esa razón, afirmó que lejos de bajar la guardia, los estudiantes se seguirán movilizando durante los próximos meses. "Estamos convencidos de que la manera en que las distintas promesas se concreten es si nos seguimos organizando y movilizando. Esto es un llamado a entender que justamente depende de todos el poder cambiar la realidad", subrayó.
Una opinión similar manifestó la vocera de la Asamblea Coordinadora de de Estudiantes Secundarios (ACES), Isabel Salgado, quien reconoció que es un "avance" que el tema educacional se esté instalado en la agenda política, lo que atribuyó a la influencias de los movimientos sociales.
No obstante, advirtió que "vamos a estar expectantes, ya que si ella llegase a salir Presidenta esperemos que cumpla con las promesas que está tirando en su discurso. Porque en el 2006 también prometió un cambio en la educación y engañó a los estudiantes".
Por su parte, el ex presidente de la FECh, Gabriel Boric, manifestó en su cuenta de Twitter que las "propuestas educacionales de Bachelet dan cuenta de cómo el movimiento estudiantil cambió el eje del debate y los límites de lo posible. Buena cosa". Aunque añadió que "ahora, hay que ver qué pasa con estas propuestas después de las primarias, cuando la candidatura de Bachelet de brusco giro hacia el centro".