"Nos estamos acostumbrando a esta relación de imposición con los estudiantes, que nos va a cobrar un precio muy alto si no la cambiamos", advirtió Tohá.
El MercurioSANTIAGO.- Como "una noche muy triste” calificó la alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá, el masivo desalojo de colegios realizado esta madrugada por Fuerzas Especiales de Carabineros, por instrucción del Gobierno.
La alcaldesa criticó la medida adoptada por el Ejecutivo y afirmó que "el Gobierno nunca hizo un esfuerzo por buscar otro camino para evitar los desalojos".
En esa línea, cuestionó que incluso se haya ordenado desalojar establecimientos cuyos estudiantes ya se había comprometido a entregar durante esta jornada.
"Había colegios que ya estaban comprometidos a ser desocupados. Ellos habían votado deponer la toma, incluso estaba hecha la pauta para hacer la entrega de los recintos y, a pesar de eso, se prefirió ordenar los desalojos en lugar de dar el espacio para que en aquellos lugares donde el diálogo estaba dando frutos pudieran darse esos avances y eso pudiera estimular a otros", afirmó Tohá a Canal 13.
Al respecto, indicó que "había un par de colegios más en que estaban también bastante avanzadas las conversaciones para que entregaran" los recintos.
No obstante, sostuvo que "en lugar de dar espacio a una solución del problema y el diálogo, que ya estaba dando sus frutos, (el Gobierno) insistió en esta vía violenta".
La alcaldesa detalló que durante la noche trabajaron activamente para tratar de convencer a los jóvenes que abandonaran los colegios antes de que llegara Carabineros. "En la mayoría de los colegios lo logramos, en muchos colegios los jóvenes salieron justo antes que entrara Carabineros y ahí se evitó toda esta situación", indicó.
De todas formas, señaló que hubo casos en que ocurrieron "episodios complicados", como en los liceos Barros Borgoño, Darío Salas y González Videla. "Se vivieron episodios en la puerta de los colegios, pero al final los jóvenes salieron por atrás", indicó.
A juicio de la alcaldesa, lo negativo de esta situación "es que nos estamos acostumbrando como país a esta relación con los estudiantes, que es una relación de imposición, que nos va a cobrar un precio muy alto si no la cambiamos y yo creo que en esto el Gobierno no ha aprendido".