Amnistía Internacional pide que niña embarazada tenga opción de abortar

SANTIAGO.- Amnistía Internacional exigió al gobierno chileno que entregue a la niña de 11 años que quedó embarazada tras ser violada por su padrastro, todo el apoyo psicológico y médico que necesita y que ponga a su disposición todas las opciones, incluyendo "servicios seguros de aborto".

"Llamamos al gobierno chileno a cumplir con sus obligaciones internacionales de asegurar que Belén tiene acceso a todo el apoyo médico, sicológico y legal que necesita, incluyendo las necesidades especiales que tiene al ser una niña, y la opción de servicios seguros, accesibles y legales de aborto", sostuvo la directora ejecutiva de Amnistía Internacional Chile, Ana Piquer.

En esa línea, la directora para las Américas de Amnistía Internacional, Guadalupe Marengo, sostuvo que "el Estado chileno es responsable de otorgarle (a la niña) todo el apoyo necesario, mientras lidia con las horrendas consecuencias físicas y sicológicas de haber sido violada y haber quedado embarazada como resultado". "Su vida, salud, esperanzas y sueños están todas en las manos de las autoridades", remarcó.

Asimismo, llamó a las autoridades nacionales a "asegurar que todas las víctimas de violación tengan el apoyo que necesitan para asegurar la vida y la salud" y sostuvo que "ninguna víctima de violación debe sufrir el ser sometida a más temor y coerción mientras está intentando recuperarse de la violación".

El organismo internacional también enfatiza que existe acuerdo entre los expertos de que el embarazo en niñas presenta riesgos específicos y consecuencias potencialmente de largo plazo para su salud física y mental.

Por eso afirma que el Estado debe asegurar a todas las víctimas de violación tener la opción de abortar y que la decisión sobre continuar o no con el embarazo deben ser adoptadas por las víctimas sin coerción.

Añade que si bien el profundo daño causado por la violación nunca puede ser enteramente reparado, estos servicios seguros de aborto son esenciales para mitigar las consecuencias.