SANTIAGO.- La Fiscalía Metropolitana Sur exhibió este martes frente al tribunal una serie de fotografías de los cuerpos calcinados de los internos fallecidos en el incendio que afectó a la torre 5 de la cárcel de San Miguel el 8 de diciembre de 2010.
Las imágenes corresponden a la prueba documental ofrecida por el Ministerio Público en el marco del juicio oral en contra de ocho funcionarios de Gendarmería acusados por cuasidelito de homicidio.
El material incluye fotos del sitio del suceso y de los diferentes espacios del recinto penitenciario donde fueron hallados los cadáveres, la mayoría de ellos muertos por quemaduras y asfixia.
Las fotos fueron apoyadas con el relato del subcomisario de la Brigada de Homicidios de la PDI, Oscar Maureira, -testigo de la Fiscalía- quien participó de los diversos peritajes realizados en el recinto tanto el día de la tragedia como en los procedimientos realizados con posterioridad en el marco de las indagatorias.
Se espera que la exhibición del total de las imágenes -1.438- culmine mañana, para continuar con el resto de las evidencias del Ministerio Público.
Para el fiscal regional Sur, Raúl Guzmán, dichas fijaciones fotográficas "dan cuenta de las diligencias investigativas que se realizaron en el sitio del suceso y muestran las condiciones en las que se encontraba el lugar donde comenzó el incendio, específicamente en el cuarto piso, y las consecuencias que tuvo en el ala norte de la cárcel".
Por su parte, el defensor público Rafael Jofré -quien representa al ex director operativo regional de Gendarmería, Jaime San Martín- recalcó que si bien la prueba rendida por la Fiscalía "es bastante cruda, nos muestran la carga de combustible que tenía el lugar donde esto ocurrió, vimos que había gran cantidad de ropa de cama y el nivel de hacinamiento que existía y que es parte de la teoría del caso de nosotros".
"También pudimos ver lo imprevisto que fue el fuego en el sentido de lo que duró", agregó, enfatizando que los imputados "no tuvieron tiempo para nada y que es lo que sostuvimos desde un principio".
Asimismo, recalcó que la responsabilidad de la tragedia radica en el Estado, argumentando que el problema con las redes húmedas y secas "se venía dando desde el año 2008".
"Las reparaciones no estaban al alcance de las personas que están siendo juzgadas hoy", recalcó el abogado.