"Lo pasado pisado y a otra cosa mariposa", dijo.
Christian Zúñiga, El MercurioSANTIAGO.- "Mi comportamiento no fue el más digno para un funcionario público".
Con esas palabras, Carlos Reyes Villalobos -el ex director de Obras de la Municipalidad de Recoleta- cerró el proceso judicial en su contra por actos de corrupción y por falsificación de instrumento público.
Esto, luego del juicio abreviado acordado con el Ministerio Público que se concretó este martes y donde la Fiscalía Centro Norte acusó por un total de 10 delitos, relacionados con pagos de diversas empresas a cambio de "omitir actos" que les permitieran operar en la comuna.
En la instancia, la fiscal Macarena Cañas solicitó una pena de 4 años de presidio menor en su grado máximo, además del pago de una multa de $50 millones y la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos.
Dicho castigo, según se expuso en la audiencia que se realizó a puertas cerradas, incluye la rebaja de la sentencia que alcanzaba los 10 años y que fue negociada con anterioridad entre la defensa del imputado y el ente persecutor penal a cambio del reconocimiento de los hechos por parte de Reyes.
Sin embargo, la pena sólo se conocerá el próximo sábado al mediodía durante la lectura de sentencia, la que -según adelantó el propio magistrado- acogerá las dos atenuantes a las que recurrió la defensa y que tienen relación con la irreprochable conducta anterior del ex funcionario municipal y la colaboración del acusado.
Esto último, según enfatizó Reyes al término de la audiencia, "fue fundamental para llegar a término", recalcando que "reconocí mis culpas, se me sentenció y ahora a asumir lo que hice mal en un momento determinado de mi vida".
"Lo pasado pisado y a otra cosa mariposa", continuó, agregando que "se abrieron otras aristas en la investigación y otros tendrán que responder por otras causas e ilícitos que se han cometido al interior del municipio".
Reyes, sin embargo, detestimó haber recibido pagos de empresas ligadas a la Universidad San Sebastián, hecho por el cual fue reformalizado el pasado 31 de julio, instancia en la que además se le revocó la prisión preventiva que cumplía hace casi un año.
Por su parte, la fiscal Cañas detalló que el condenado aseguró haber recibido una oferta de más de $14 millones de una persona relacionada con dicho plantel, sin embargo, de acuerdo a su declaración, el pago no se concretó.
El imputado fue investigado por haber recibido en un año más de 114 millones de pesos de parte de empresas por cohecho.
Entre las compañías involucradas aparece la firma Ceresita, que consiguió autorizaciones para seguir funcionando tras pagar más de $20 millones, pese a que presentaba problemas para operar en Recoleta.
Gendarmería recomienda libertad vigilada
El Tercer Juzgado de Garantía de Santiago estableció que si bien la sentencia que recibirá Carlos Reyes se conocerá el próximo 10 de agosto, adelantó que el condenado cumplirá su pena en libertad.
Esto, porque se acogerá la recomendación del informe presentencial elaborado por Gendarmería que recomienda que el ex funcionario cumpla su pena en el medio abierto.