SANTIAGO.-Revuelo causaron las primeras declaraciones del ex superintendente de Valores y Seguros, Guillermo Larraín, tras ser presentando como uno de los integrantes del equipo económico del comando de Michelle Bachelet.
En entrevista con CNN Chile, el economista admitió que alcanzar un sueldo mínimo de 250 mil pesos sin afectar el empleo "no es posible" en el corto plazo, pese a las críticas que ha recibido el actual Gobierno desde parlamentarios de la Nueva Mayoría por sus propuestas en esta materia.
Tras una dura negociación con la oposición, el Ejecutivo finalmente pudo aprobar un salario mínimo de 210 mil pesos.
"Es muy difícil un sueldo mínimo de 250 mil pesos (sin afectar el empleo). Cualquier estudio más o menos razonable de cómo opera el mercado del trabajo nos indica que si tuviéramos un sueldo mínimo de la noche a la mañana de 250 mil pesos habría un problema importante de desempleo. Es deseable avanzar en materia de salario mínimo, pero 250 mil ciertamente está pasado del tejo", explicó.
Larraín también admitió que el gobierno de Bachelet dejó un déficit estructural de 1,7%, mayor al 1,2% del producto que dejará el Presidente Sebastián Piñera, pero que esto obedeció a la crisis económica de 2008.
"Este Gobierno va a dejar el déficit estructural de 1,2% del producto en comparación del 1,7% que dejó el proceso de Michelle Bachelet", dijo Larraín, argumentando que se produjo "por las diversas crisis económicas que se vivieron en el mundo".
"Este Gobierno dejará una economía en orden pero con déficit", enfatizó, agregando que "este déficit no tiene mucha lógica, porque lo que hemos visto en los últimos cuatro años, donde hay que reconocer que ha habido un crecimiento importante, es ¿por qué si hubo crecimiento... se entrega el Fisco con este nivel de deuda?".
En cuanto a temas energéticos, el integrante del equipo económico de la candidata opositora reconoció que la economía chilena deberá seguir recurriendo a las termoeléctricas.
"Este Gobierno no ha solucionado los problemas energéticos que ya se tenían por lo que la única solución de corto plazo es utilizar energía de termoeléctricas", dijo Larraín, señalando que esta medida no "es la más deseable" pero que es la que se "deberían utilizar para evitar algún black out".
"Hay que tener una cuota de realismo, si queremos que esta economía funcione esto va a probablemente a llevar al uso de este tipo de energía aunque no sea las más deseables", finalizó.
Finalmente, Larraín confirmó que se deberá modificar el Fondo de Utilidades Tributarias (FUT) con el fin de recaudar cerca de US$8.200 millones más en impuestos, asegurando que esta medida "no afectaría a las pymes, porque el FUT está a nivel de las grandes empresas".