Marco Enríquez-Ominami.
Héctor Aravena, El MercurioSANTIAGO.- El candidato presidencial del PRO y el Partido Liberal, Marco Enríquez-Ominami, se refirió a la muerte del retirado general del Ejército, Odlanier Mena, recordando que fue condenado por crímenes contra los Derechos Humanos y que pagaba su pena en un centro de detención que se decidió cerrar luego de una serie de reportes de prensa que daban cuenta de los beneficios que tenían sus diez internos.
"Él fue condenado y tuvo derecho a un spa, una cárcel que se parecía más al Hyatt que a un penal. Sus víctimas no tuvieron un proceso, sí fueron condenadas y fueron sometidas a la tortura y, por tanto, nos parece que solamente vale la pena subrayar eso. Él sí tuvo en vida un trato digno que él mismo no le quiso dar a sus víctimas. Lo sentimos por su familia, que no tiene ninguna culpa", dijo el aspirante La Moneda.
"Ante el Estado somos todos iguales y en las cárceles, no corresponde ningún privilegio. Si somos gobierno y obtenemos esa mayoría, se cerrará Punta Peuco. Es lo correcto, porque tiene que haber justicia. Con los recursos invertidos en Punta Peuco y en el Penal Cordillera, créame que los reinvertiremos en levantar el estándar de las cárceles donde están los delincuentes comunes", agregó.
El abanderado progresista dio a conocer una serie de compromisos programáticos en defensa de los consumidores –en particular aquellos con créditos y deudas– acompañado por colaboradores programáticos y candidatos del pacto Si Tú Quieres Chile Cambia, y asegurando que "terminaremos con los intereses sobre intereses" lo que calificó como "prácticas abusivas"