TALCA.- El tribunal de Garantía de Chanco será el que decida, finalmente, si es que accede a la solicitud de exhumación del cadáver de Hernán Canales, la persona que falleció, tras ser atropellada por Martín Larraín Hurtado, hijo del presidente de RN, Carlos Larraín, en la localidad de Curanipe, Región del Maule.
Según fuentes del Ministerio Público, en las próximas horas la fiscalía local de Cauquenes, entregará un escrito ante el citado juzgado solicitando la diligencia, que ya fue aprobada por el fiscal Juan Pablo Pereira, tras la solicitud del abogado de la familia de la víctima, Gonzalo Bulnes.
De acuerdo a lo informado hoy por "The Clinic", la idea es contrastar la pericia con la realizada por el Servicio Médico Legal, que asegura que la víctima falleció a los 10 minutos del fuerte impacto, luego que el mismo imputado señalara en su declaración judicial que estuvo hasta 25 minutos junto a Hernán Canales y que aún seguía vivo cuando lo abandonó.
Con lo anterior se busca establecer cuánto tiempo pasó entre el atropello y el deceso de Hernán Canales, y si es que el joven pudo auxiliarlo en ese lapso.
El fatal atropello ocurrió el 18 de septiembre pasado en un camino de Curanipe, mientras Martín Larraín conducía su jeep en estado de ebriedad y en compañía de unos amigos.