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Carabinero "guardador" obtiene cuidado personal de niña tras larga batalla judicial

La pequeña permanecerá junto a su "familia" mientras se tramita su tutela legal. Quedará bajo revisión social cada un año.

28 de Octubre de 2013 | 16:18 | Emol
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SANTIAGO.- Tras una larga batalla judicial, el carabinero José Luis Paredes y su esposa Joselyn Bahamonde obtuvieron el cuidado personal de la pequeña de tres años que criaban -en su calidad de guardadores- desde los ocho meses.


Así quedó establecido durante la audiencia realizada este lunes en el Juzgado de Familia de Ancud, que determinó que la niña permanezca junto a la pareja mientras realizan los trámites para su tutela legal.


El dictamen de la instancia judicial determinó además que el cuidado personal de la menor quedará bajo revisión social cada un año "para que ellos cumplan con los requisitos para adoptar definitivamente a Montserrat".


De acuerdo a lo explicado por las abogadas que representaron al matrimonio Paredes-Bahamonde, Alejandra Mercado y Marianela Villarroel, la resolución es definitiva por tratarse de una salida colaborativa.


"No hay muchas palabras que decir, estamos conmovidos. Es un avance tenemos un año más para quedarnos con la hija. Agradecer a todos y a mi abogada que se portó un siete y a mi institución (Carabineros) y a mi gente", expresó Paredes emocionado.


A su turno, Joselyn Bahamonde compartió las palabras de su esposo, manifestando su alegría porque "por fin estaremos con nuestra pequeña y esperamos que cambien la ley de adopción lo más pronto posible porque ya estamos casados".


La audiencia de esta jornada, en la que se analizaron informes de peritos, el Sename y psicológicos de los involucrados, era seguida con expectación debido a que había sido suspendida previamente en dos ocasiones.


El caso de "grillito", como la denominan sus futuros padres, causó revuelo en la opinión pública cuando se conoció que matrimonio Paredes-Bahamonde debía entregar a la pequeña para que fuese adoptada por otra familia, pese a que la cuidaban desde que tenía ocho meses de edad.


Tal fue la desesperación de la familia, que el carabinero se mantuvo en calidad de fugitivo por unos días, con el objeto de evitar que la niña fuese alejada de sus brazos.

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